AMLO reconoce que “plan B” no le permite cambiar estructura del INE y la Cámara de Diputados

TEXTO Carlos Montesinos @calesmont
El presidente Andrés Manuel López Obrador (AMLO) reconoció que su “plan B” a la reforma electoral no sería suficiente para modificar los mecanismos de selección y el número de integrantes del Instituto Nacional Electoral (INE) y la Cámara de Diputados. Pero adelantó que se podría reducir el presupuesto destinado a organizar comicios.

“¿Hasta dónde puedo con la nueva iniciativa? Pues solo lo que signifique reformar la ley. Estoy analizando porque estos coparon todo. Por ejemplo, en la Constitución está el mecanismo para la elección de los consejeros y si no se reforma la Constitución, no se puede en una ley secundaria, ahí está el mecanismo en donde son los partidos arriba los que deciden”, admitió.

También explicó que “ahí está en la Constitución de que deben de ser 500 diputados, 300 de mayoría y 200 plurinominales. Entonces, estoy viendo”. Pues volvió a señalar que para una modificación constitucional se necesita una mayoría calificada de 334 votos en la cámara baja, cantidad que no alcanza Morena y su coalición.

AMLO reconoce que “plan B” no le permite cambiar estructura del INE y la Cámara de Diputados

Esto pues, acusó, “cuando los neoliberales corruptos tenían el control de todo, reunían con facilidad los 334 votos para reformar la Constitución”. Poniendo como ejemplo no solo la reforma electoral de 2014, sino también las reformas fiscal y energética para las que “en la Constitución escriben todo”, aún agregando artículos transitorios para impedir futuras modificaciones.

Sin embargo, advirtió que, mediante una reforma a leyes secundarias “sí se puede reducir el presupuesto sin violar la Constitución”. Al ser cuestionado sobre si su estrategia será asfixiar al INE, respondió que “no, por favor, hasta se decía antes: el creador aprieta pero no ahorca” y se limitó a argumentar que busca evitar que haya duplicidades.

También explicó que se puede evitar la compra del voto y recordó que ya se aprobó una reforma constitucional para catalogar los delitos electorales como graves. Acusando que, en la citada modificación de 2014, “dejaron abierta la puerta para la compra de los votos, ese es un mecanismo”, poniendo como ejemplo los casos de los monederos electrónicos.