La aprobación de la Ley de Revocación de Mandato “no puede más que abonar en la construcción de una sociedad empoderada, crítica e involucrada en las decisiones políticas del país. ¡Le da voz y voto al pueblo!”, manifestó el senador Joel Padilla Peña.
No obstante, el vicecoordinador del Partido del Trabajo en el Senado, advirtió que la coyuntura política puede llevar a algunos a disfrazar sus intereses personales de anhelos democráticos e intentar utilizar este ejercicio de participación ciudadana como un arma política.
Sostuvo que con su aprobación se da la oportunidad a toda la sociedad mexicana de evaluar al presidente de la República, “no como los gobiernos neoliberales que hoy siguen en la sombra de la impunidad y de la corrupción”.
Es por ello por lo que la fracción parlamentaria del Partido del Trabajo confía en que la gente sabrá informarse, participar y reflejar su sentir en este proceso, pues en la sociedad es donde radica la fuerza de la democracia, puntualizó el legislador.
Aprobación de revocación de mandato cristaliza anhelo de la izquierda de empoderar a la ciudadanía: PT
A nombre de su bancada, Joel Padilla hizo un llamado para no caer en debates absurdos, ya que con la expedición de esta ley se está cumpliendo con un compromiso pactado con la ciudadanía y se elimina la omisión legislativa que existe desde hace más de dos años.
Joel Padilla reconoció que el camino para consolidar un anhelo de la izquierda no ha sido fácil; no obstante, a pesar de los obstáculos y oposición del bloque conservador, se concretó este derecho ciudadano.
El voto a favor del Partido del Trabajo fue por su convicción de que la democracia se construye con la voz del pueblo y porque la relación entre gobierno y ciudadanía se basa a través del diálogo, argumentó el legislador por Colima.
“Hoy, en la izquierda mexicana avanzamos haciendo historia. Mañana tocará a los ciudadanos dar uso a las herramientas de participación democrática que se aprueben en el Congreso”, subrayó.
El senador petista recordó que si bien en el país ya existe un antecedente dentro de la Constitución de la Ciudad de México.
Con la aprobación del dictamen México será el cuarto en Latinoamérica en incorporar la revocación del mandato presidencial para consolidar una democracia directa.
