El PRD, en riesgo de ser chiquillada

VÍCTOR MAYÉN / ÁNGEL ÁLVAREZ

Ante le nueva crisis por la que atraviesa el PRD debido a la renuncia de Agustín Basave a la dirigencia nacional, ex militantes de ese partido advirtieron que corre el riesgo de convertirse en un partido “marginal”.

El senador Alejandro Encinas, quien fue fundador del sol azteca y jefe de Gobierno de la Ciudad de México bajo sus siglas, lamentó que esta organización “hoy esté a punto de convertirse en un partido más, un partido marginal de aquellos que existían en la izquierda de los años 70’s”. Atribuyó lo anterior a la pérdida de claridad en sus objetivos y principios y a que ha sido rehén de las “tribus” que han predominado desde su fundación.

Encinas Rodríguez dijo que si quiere sobrevivir, el PRD tendrá que emprender “un cambio de rumbo”, que incluya un relevo generacional, así como la formación de nuevos cuadros de dirigentes y de candidatos que recuperen la vocación democrática y el proyecto que le dio origen.

Tres candidatos, un partido Son tres los candidatos visibles para sustituir a Agustín Basave a partir del sábado: Alejandra Barrales, Beatriz Mojica y Pablo Gómez.

Barrales Magdaleno, actual secretaria de Educación de la Ciudad de México, será propuesta por un bloque que integra el 70 por ciento de los votos del Consejo Político Nacional del PRD, además de que cuenta con el respaldo del jefe de Gobierno, Miguel Ángel Mancera.

Su eventual liderazgo significaría el fin del dominio de Nueva Izquierda, “Los Chuchos”, corriente que desde 2008 se hizo del control del partido.

La actual secretaria General, Beatriz Mojica, se dijo lista para llegar a la dirigencia nacional. Pidió a la militancia dar continuidad al proyecto de Nueva Izquierda y demandó “piso parejo” para quienes pretenden contender por el PRD en la elección presidencial de 2018. Mientras que Miguel Barbosa, coordinador del PRD en el Senado, se pronunció porque Pablo Gómez sea el nuevo líder nacional.

“No podemos continuar como una izquierda que sólo se mira al espejo y se consume en sus conflictos internos. Necesitamos que el PRD se haga escuchar ante el gobierno y que contraste con otros partidos”.