Luego de presidir 55 sesiones ordinarias como presidenta del Senado de la República, Olga Sánchez Cordero presentó su informe final de actividades en donde destacó que nuestro tiempo exige actuar bajo una óptica pluralista y democrática, buscar nuevos caminos de unidad en el ejercicio de las mayorías parlamentarias, así como plantear alternativas adecuadas a nuestro tiempo que den respuestas reales para el bienestar de la nación.
“Es tiempo de seguir dando pasos en el desarrollo de nuestras instituciones, que garanticen no tener retrocesos en las progresividad de derechos”, enfatizó.
Ante legisladores de todos los grupos parlamentarios, integrantes del Gabinete legal y ampliado, ministros de la Corte, gobernadores (entre ellos el panista Francisco García Cabeza de Vaca, de Tamaulipas), miembros del Cuerpo diplomático acreditado en México, colectivos defensoras de las mujeres, entre otros invitados a la vieja casona de Xicoténcatl, la senadora dijo tener la convicción de que el parlamento es para dialogar, debatir todas las inquietudes de la República y garantizar siempre que esté representada la diversidad social política y cultural de una nación.
“Negar esta realidad implica cerrar las instituciones al pueblo y cuando eso sucede, la sociedad inevitablemente la cimbra. Vivir en democracia nos obliga a fomentar la participación del pueblo en la vida pública y hacer los partícipes del proceso democrático y, con ello consolidamos, la legitimidad del parlamento”.
Comentó que los contrapesos legislativos se transforman para que, sin generar las parálisis legislativas que a nadie beneficia y a todos perjudican, “logremos establecer un esquema de rendición de cuentas sobre nuestra labor principal: la labor legislativa.
Olga Sánchez Cordero plantea alternativas reales para el bienestar de la nación
Tras una hora de rendir cuentas, que se prolongó por casi dos horas para recibir el saludo de los aproximadamente 200 invitados, Olga Sánchez Cordero hizo una reflexión sobre sobre el país al intentar dilucidar cómo poder generar mejores condiciones para propiciar la transformación que México exige: “Siempre tuve en mente que las acciones deben estar acompañadas de legitimidad social”.
En su informe, que abarca del primero de septiembre de 2021 hasta este jueves, quedando pendiente los días por cumplir su mandato al frente de la Mesa Directiva el próximo 31 de septiembre, la también ministra en retiro consideró que la conducción que impulsó fue la correcta, “pero ustedes senadoras y senadores, habrán de tener su valoración ulterior”.
Luego de reconocer el voto de confianza de los senadores que la llevaron a presidir los trabajos de la Cámara alta (menos Lilly Téllez que votó en contra), la también primera secretaria de Gobernación manifestó que haber estado a la altura de la representación le dejó aprendizaje y, ahora, “estoy más convencida que en cualquier responsabilidad que el destino me depare, seguiré impulsando las libertades, la progresividad de derechos y el bienestar del pueblo”.
Detalló que la presidencia de la Mesa Directiva de la LXV Legislatura no le impidió presentar 25 propuestas de reformas constitucionales y a leyes diversas, con la finalidad de coadyuvar a mejorar el orden jurídico nacional.
Refirió que en materia constitucional y en congruencia con la reforma sobre la nacionalidad mexicana que presentí en 2018 y que es texto vigente de nuestra Constitución desde 2021 en el artículo 30, se otorgó, de un día a otro, la nacionalidad mexicana a 36 millones de personas fuera de nuestro territorio.
Olga Sánchez Cordero plantea alternativas reales para el bienestar de la nación
Propuso también una iniciativa con la intención de modernizar al notariado público y otra para el ahorro de papel con una reforma al artículo 70 constitucional y en tres leyes secundarias para que las comunicaciones entre los tres poderes y los trámites y comunicación en el Senado privilegien el uso de las tecnologías de la información.
En materia de derecho de las mujeres, la senadora presentó varias iniciativas acompañadas por otras legisladoras, entre ellas para atender la depresión perinatal y postparto.
Una más para reformar la Ley General del Sistema Nacional de Seguridad Pública y crear la Comisión Nacional Anti-homicidios, así como una más para perseguir y castigar los feminicidios y la tentativa de feminicidio que hasta hoy no se han legislado en ninguna entidad federativa.
De igual forma, presentó reformar a diversas disposiciones de la Ley General para Prevenir, Sancionar y Erradicar los delitos en materia de trata de personas y para la protección y asistencia a las víctimas de estos delitos con la intención de hacer viable la judicialización de los casos.
En cuanto a su responsabilidad en materia de política, durante su presidencia se ratificaron 10 instrumentos internacionales en materia de comercio control de armas y regulación migratoria, así como 394 nombramientos y ratificaciones se tomó protesta a 15 embajadores y un cónsul.
