Proponen definir seguridad interior

 

Celebra la Coparmex reglamentación al Ejército


Es necesario que se defina de manera correcta qué es exactamente el concepto seguridad interior para marcar los momentos en los cuales se debe hacer uso de las Fuerzas Armadas y, de llegar ese momento, se establezcan las funciones específicas de las mismas, consideró José Antonio Ortega Sánchez, presidente del Consejo Ciudadano para la Seguridad Pública y Justicia Penal de la Coparmex.

“Debemos tener bien marcadas y establecidas las acciones, porque actualmente estamos ante puras interpretaciones de la Corte. Por eso es importante poner en marcha una ley de seguridad interior bien estructurada”, expresó.

Con esta reforma, señaló, se dará un importante paso hacia delante en el país, tanto en materia de seguridad como de derechos humanos.

“Las quejas y recomendaciones que recibe y emite la Comisión Nacional de los Derechos Humanos (CNDH), han disminuido considerablemente del sexenio pasado al actual y si se aprueba esta iniciativa de ley esas quejas serán practicante nulas”, aseveró Ortega Sánchez.

En entrevista para CAPITAL MÉ- XICO, indicó que las Fuerzas Armadas están pagando “un alto costo político” por la falta de regulación de sus actividades y comentó que se necesita un marco legal que las regule para saber “hasta dónde sí y hasta dónde no pueden llegar”, apuntó.

El presidente del Consejo Ciudadano para la Seguridad Pública afirmó que estamos frente a un panorama de gobernadores “muertos”, que no asumen su responsabilidad en materia de seguridad, misma que han dejado en manos de militares y marinos a sabiendas que no son sus funciones, y ante las cuales “tanto el general Cienfuegos como el almirante Vidal han hecho un buen trabajo”.

Calificó a las policías estatales y municipales como un lastre que se debe depurar a fin de que sean capaces de hacer frente a las tareas para las que fueron creadas.

También celebró dicha iniciativa debido a que esta problemática no es nueva, pues se padece desde hace al menos 10 años y “nadie había querido asumir responsabilidad”.