En conjunto con Nacional Monte de Piedad y Montepío Luz Saviñón, el gobierno de la Ciudad de México otorgó apoyos a 63 asociaciones civiles, las cuales utilizarán los fondos para el desarrollo de programas de asistencia social, enfocados a personas en situación de vulnerabilidad y a quienes viven en la calle.
El jefe de Gobierno de la Ciudad de México, Miguel Ángel Mancera, afirmó que su administración sí realza acciones para apoyar a las personas que viven en las calles y no los mandan al “cajón del olvido”.
Durante la entrega de más de 15 millones de pesos para el Programa de Financiamiento para la Asistencia e Integración Social 2016 (Profais) que se efectuó en el Antiguo Palacio del Ayuntamiento, el mandatario capitalino resaltó que se atiende a este sector de la población, que en otras partes del mundo son los olvidados y se ignora su existencia.
“Tienes dos opciones en estas grandes ciudades; hacer como que no pasa nada y dejar que eso suceda en las noches; en las noches en donde todas las personas en situación de vulnerabilidad hacen suya la ciudad, hacen suyas las calles. Nosotros preferimos hacer algo y dar historias de vida y preferimos realizar rescates y realizar reinserciones, hoy la Ciudad de México está haciendo algo, no se está quedando rezagada y no está mandando al último de los cajones o al olvido esta tarea”, comentó el jefe capitalino.
Mancera agregó que ya se creó un protocolo de atención para esta población que se pondrá en práctica, se evaluará y se buscará que quede garantizado en la Constitución local para que pueda continuar al concluir esta administración.
“Me interesaría que este protocolo vaya tomando fuerza, le encargo a Desarrollo Social, porque si este protocolo funciona, nosotros podemos darle un marco normativo para que no se olvide; uno de los objetivos que tenemos con la Constitución que se está trabajando, la Constitución de la Ciudad de México, es dar garantía a muchas de estas tareas”, agregó Miguel Ángel Mancera.
Luego de exponer varios casos de hombres y mujeres que lograron salir de las calles y aprender un oficio, el gobernante local aseveró que el trabajo social en la capital no es paternalista, a diferencia de otras partes del país, pues de lo que se trata es de reintegrar a las personas a la sociedad y el siguiente paso será ayudar a quienes además enfrentan una enfermedad mental.
Consideró que este esfuerzo debiera también realizarse en las zonas de más vulnerabilidad de la República, como la Selva Lacandona o la Sierra Tarahumara.
“No podemos cerrar los ojos a las realidades de opresión, pobreza y necesidad que se viven en las grandes ciudades y en las poblaciones de México”, finalizó.
