Retrasan por seis meses túnel en Circuito-Tlalpan

 

Sobse prometió entregar la obra en marzo, pero será hasta septiembre


L. SERIEYS/H. GUTIÉRREZ 

La Secretaría de Obras y Servicios (Sobse) ha retrasado seis meses la entrega del túnel en Circuito Interior y Calzada de Tlalpan.

En marzo pasado prometió entregar los trabajos, pero la dependencia capitalina modificó la fecha hasta julio, pero finalmente será hasta el próximo mes cuando quede listo.

En un recorrido, CAPITALMEDIA constató que sin mayor prisa se desarrollan las obras para ampliar el bajo puente de ese cruce vehicular.

A decir de los trabajadores, se ampliaron dos carriles, pero la temporada de lluvias no les ha permitido avanzar debido a los encharcamientos, así como las contingencias ambientales que se decretaron en meses anteriores y que llevaron a suspender los trabajos.

Tan sólo las lluvias que provocó el fenómeno hidrometeorológico “Earl” ocasionó precipitaciones en la capital del país, lo que dejo encharcamientos en la zona por lo que los trabajadores se han tenido que dedicar a sacar el lodo que hay dentro del deprimido.

De acuerdo con el secretario de Obras, Edgar Tungüí Rodríguez, en la zona habrá una mejora del entorno urbano, como parte de las obras de mitigación de la construcción de la Autopista Urbana Sur.

Aunque en mayo pasado el funcionario capitalino reportó un avance general de 80 por ciento en la construcción de los túneles para las gazas surponiente y suroriente, la realidad es que todo quedará listo hasta septiembre.

Dichos túneles pasan por debajo de la Línea 2 del Sistema de Transporte Colectivo (STC) , la cual sólo en una ocasión suspendió su servicio en algunas estaciones por un desgajamiento.

Sin notificación en Mixcoac

El secretario de Obras, Edgar Tungüí Rodríguez, aclaró que aún no reciben la orden judicial que lograron vecinos a través de un amparo para suspender la tala de árboles en el camellón central de la avenida Barranca del Muerto al cruce con Insurgentes, zona de construcción del Deprimido de Mixcoac.

Recordó que por recomendación de los residentes se derribaron 528 árboles, número menor a los que tenían autorizados, y reubicaron a más de 250.

“De los 855 árboles que el estudio de impacto ambiental nos permitía poder talar, en realidad nada más fueron 580 árboles; con las modificaciones que le hicimos al proyecto logramos salvar en números redondos 30 por ciento de los árboles y ya no hay más árboles por talar”, argumentó Tungüí Rodríguez.