Reunión bilateral de planeación y seguridad fronteriza México-EUA

SSPC
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Alfonso Durazo, reconoció que las reuniones bilaterales con EUA para frenar el contrabando de armas a México llevan décadas sin solución.


El Secretario de Seguridad y Protección Ciudadana, Alfonso Durazo, reconoció que las reuniones bilaterales con Estados Unidos para frenar el contrabando de armas a México llevan décadas sin solución.

“Estas reuniones llevan décadas y la realidad, es que los resultados en el ámbito del combate al contrabando de armas no han dado resultados sustantivos”.

El secretario propuso cambiar la visión de lo que representa la “Disponibilidad” de un arma en la generación de todo el círculo vicioso de la Inseguridad.

“Yo veo que el primer eslabón de este círculo vicioso es la disposición de un arma, de ahí derivan el resto de acciones que desembocan, incluso en la demanda de droga y en la muerte de nuestros jóvenes”.

Al encabezar la “Reunión Binacional de Planeación y Seguridad Fronteriza”, Durazo Montaño, señalo que en el caso de México, el hecho de que las organizaciones criminales dispongan de una capacidad de fuego con frecuencia superior al de las Fuerzas Federales de seguridad pública, en ocasiones limita la acción de las autoridades.

“México como Estados Unidos y otros países avanzados son firmantes de un acuerdo internacional que limita la capacidad de fuego de las fuerzas policiales en zonas urbanas y semi-urbanas nada más que esta restricción no aplica obviamente para las organizaciones criminales”.

Durazo Montaño, explicó que en el 70% de los casos donde está involucrada un arma, esta ha ingresado de contrabando al territorio nacional, y puso como ejemplo la capacidad de fuego que utilizaron grupos delictivos en los hechos ocurridos en Culiacán, Sinaloa y la masacre ocurrida en Bavispe, Sonora.

“Estos hechos tienen un par de características, la primera de ellas es que en ambos casos el armamento es de fabricación norteamericana, que es de muy alto calibre, particularmente, en el caso de Culiacán, Barrets calibre .50 y aquí con una agravante que es armamento fabricado para uso exclusivo del ejército Norteamericano y en el caso de Bavispe el armamento utilizado también es de fabricación norteamericana”.

Ante funcionarios fronterizos estadounidenses, Alfonso Durazo, dijo que no se trata de endosar o “echarse la bolita” unos a otros, sino que ambas Naciones tienen responsabilidades y capacidades extraordinarias para sumar esfuerzos y encontrar así una solución, definitiva.

“Sin ello, sin el control del contrabando de armas, no es posible cerrar el círculo vicioso que es: armas capacidad de fuego, crecimiento de las organizaciones criminales, narcotráfico, lavado de dinero y finalmente la diversificación criminal, que termina por afectar en lo que más lastima a la sociedad”.

El Funcionario Federal, dijo que es un tema complejo porque se tiene que diseñar conjuntamente soluciones que no afecten el intercambio comercial y la intensa relación que tiene la comunidad fronteriza, la cual califico de comunidad Bi-cultural.

“Hay una relación extraordinaria, entre nuestros respectivos Gobiernos, y hay una voluntad reiterada, palpable de colaborar en todos los ámbitos, pero particularmente en el ámbito de la seguridad, tenemos por ello un espacio de maniobra extraordinario, y no exagero si lo califico, de histórico”.

Y agregó:

“El gobierno Norteamericano tiene sus prioridades, desde el ámbito, mexicano el primero es el contrabando, de armas, el segundo es el lavado de dinero, el tercero es combatir las adicciones y reducir la demanda por que sin una reducción de la demanda será imposible, reducir la oferta”.

Por su parte el embajador de Estados Unidos en México Christopher Landau, aseguró que fomentar el Flujo Migratorio ordenado y legal, es fundamental para ambos países, así como tener fronteras más seguras generaran mejores condiciones para el comercio, que abonaran a las economías de ambos países teniendo fronteras más seguras, en particular en fortalecer el T-MEC.

“México es nuestro vecino y principal socio comercial ahora con la ratificación del T-MEC, nuestro comercio se fortalecerá, y alcanzará nuevos niveles sin precedentes, en un esquema ganar, ganar para que nuestros pueblos tengan, un porvenir mucho mejor”.

El representante en México del Gobierno de Washington, señaló que ninguno de los dos países está seguro cuando el otro no lo está, por ello la frontera es el espacio común donde sea más intensa la cooperación.

“La seguridad es un desafío compartido y una responsabilidad compartida, sin ella difícilmente puede haber crecimiento y prosperidad, más aún cuando, nuestras economías se encuentran tan entrelazadas”.

Landau, señaló que uno de los principales objetivos en los que se deben de concentrar los esfuerzos binacionales, uno de los puntos clave en el que se deben de concentrar es el tráfico de armas, drogas y efectivo y el de erradicar los señalamientos de unos a otros para ver de quien es la culpa por las drogas que llegan a Estados Unidos o las armas que ingresan a México de manera ilegal.

“Por muchos años los grupos criminales, se han aprovechado de nuestros desacuerdos históricos al respecto, este tipo de encuentros demuestran que los señalamientos quedaron atrás, porque aquí no solo fomentamos la cooperación y el trabajo conjunto sino que también comprobamos que hay un dialogo genuino entre nuestros países”.

El Embajador, destacó que los Presidentes Andrés Manuel López Obrador de México y Donald Trump de Estados Unidos, desde 2019, acordaron fortalecer la materia de Seguridad, también recordó que funcionarios norteamericanos han tenido importantes reuniones en México que caminan a un mismo fin.

“Hay muchas reuniones pero lo realmente importante es que tengamos resultados, y en eso estamos enfocados, también en operaciones y que no solamente haya palabras, porque esto no puede seguir así, para ninguno de los dos países”.

Christopher Landau, aseguró que esta problemática impacta en la calidad de vida de los ciudadanos de los dos lados de la Frontera.

“Muchas veces es cuestión de vida o muerte, sobre todo la cuestión de las Drogas, las Armas, esas son de las cosas de las más importantes que hay en la relación y de todo corazón yo creo que esto no es algo que se puede solucionar solo de un lado no es un problema mexicano, ni un problema estadounidense, es un problema absolutamente compartido”.

El Embajador reconoció que muchas personas no creían que los dos Gobiernos se iban a llevar bien, pues los Presidentes son muy distintos:

“Al contrario, ambos Presidentes tienen un espíritu muy estrecho de cooperación y un ánimo de cooperar y creo que hemos logrado, cosas sin precedentes, porque ambos presidentes no son Ortodoxos, y creo que están dispuestos a hacer cosas distintas me parece de los mas importante”.

En la “Reunión Binacional de Planeación y Seguridad Fronteriza”, participaron funcionarios de ambos gobiernos que tienen injerencia directa en la frontera.