Con el propósito de revisar si las políticas públicas dirigidas hacia el sector primario atienden las necesidades de las unidades de producción agrícola, pecuaria y forestal, senadores aprobaron un dictamen para exhortar a la Secretaría de Agricultura y Desarrollo Rural que analice los resultados definitivos del Censo Agropecuario 2022.
El Censo Agropecuario 2022 es el noveno estudio que se realiza, el que lo precedió fue el de 2007 y en los 15 años de diferencia se realizaron encuestas nacionales en la materia y una actualización del Censo Agropecuario en 2016.
Además, piden al Instituto Nacional de Estadística y Geografía (INEGI) que revise, justifique metodológicamente y, en su caso, recomiende la periodicidad de mínimo cinco años y máximo 10 años con la que deben realizarse los censos agropecuarios, a fin de que su ejecución sea considerada en el Presupuesto de Egresos de la Federación del año respectivo.
En el documento avalado, las y los legisladores explicaron que el INEGI ofrece con estos censos información oportuna sobre las actividades agrícolas, ganaderas y forestales en las áreas rurales del país.
Los datos arrojan información como la siembra y la cosecha de especies agrícolas, cría y explotación de animales, así como producción, autoconsumo, destino de la producción, sistemas de riego, uso de fertilizantes, maquinaria y equipo, mano de obra, crédito y seguro.
Además, evidencian los problemas que enfrentan las y los productores, programas de apoyo, y acciones para proteger el medio ambiente; también, temas que se relacionan con el aprovechamiento forestal, como el volumen de madera obtenido, la reforestación y la deforestación.
Estos resultados, enfatizaron, son útiles porque mediante ellos, el gobierno obtiene indicadores para las políticas públicas, ya que contribuyen a los Objetivos de Desarrollo Sostenible.
Del mismo modo, las empresas que prestan servicios agropecuarios pueden definir sus políticas de mercado; las organizaciones de productores pueden conocer las características de sus asociados; los investigadores realizar estudios de las actividades del campo; y los productores y la sociedad en general saber qué, cuánto y cómo se produce.
KJ