Tanhuato y Nochixtlán, decisivos en salida del jefe de la policía

La mañana del 19 de junio, un grupo de integrantes y simpatizantes de la Coordinadora Nacional de Trabajadores de la Educación, bloqueaba la autopista Huajuapan de León-Oaxaca, en el tramo Nochixtlán- San Francisco Telixtlahuaca.

Algo se salió de control, de pronto, civiles y policías federales se enfrentaban a balazos, dejando un saldo de al menos ocho muertos y 100 heridos.

Las primeras declaraciones del comisionado General de la Policía Federal, Enrique Francisco Galindo Ceballos, fueron en el sentido de que ningún elemento de la corporación acudió armado para retirar el bloqueo.

Sin embargo, las primeras imágenes difundidas por los medios de comunicación lo contradicen. Entonces, cambia su versión y asegura que al final del enfrentamiento fue cuando arribó personal armado.

No fue la primera ocasión en que Galindo se vio involucrado en acciones que ponían en entredicho el respeto a los derechos humanos por parte de la Policía Federal.

En Tanhuato, Michoacán, el 22 de mayo de 2015, otro enfrentamiento entre presuntos civiles armados y policías federales, dejó un saldo de 42 muertos y al menos dos testigos que narraron los hechos.

El informe presentado el pasado 18 de agosto por la Comisión Nacional de los Derechos Humanos fue devastador. Al menos 22 de los 42 muertos fueron ejecutados arbitrariamente, dijo el ombudsman, Luis Raúl González Pérez.

Abundó que los policías no sólo realizaron disparos a muy corta distancia, sino que por lo menos dos de ellos presentaban balazos en la espalda mientras trataban de escapar. Al resto, les dispararon desde helicópteros en el aire.

De acuerdo con el informe, los policías podrían haber sembrado las armas y movido los cuerpos.

Galindo Ceballos no pudo desmentir el informe de la CNDH y su jefe, Renato Sales, salió al paso, aceptando la recomendación, pero no la responsabilidad que implica el reconocimiento de violaciones a los derechos humanos por parte de los policías federales, ayer, Galindo fue cesado, a pesar de que el presidente Enrique Peña Nieto aseveró apenas el fin de semana que n  habría cambios en su gabinete.