Lamentablemente el río Pánuco ha sido contaminado por actividades domésticas, agrícolas, ganaderas e industriales, enunció el senador Américo Villarreal Anaya, quien impulsa un punto de acuerdo para revertir ese daño, incrementar su caudal y garantizar el suministro de agua potable en Tamaulipas.
El legislador de Morena refirió que se trata de uno de los ríos más grandes de nuestro país, que atraviesa San Luis Potosí, Veracruz y Tamaulipas, y que es vital para alrededor de 15 millones de personas, ya que su caudal suele ser utilizado para solventar la escasez de agua en algunas ciudades.
Aunado a lo anterior, agregó que la falta de lluvias ha generado una disminución en su caudal, lo que ha propiciado que no haya agua potable para las y los ciudadanos que residen en estos estados.
Por ello, Américo Villarreal propuso exhortar a las secretarías de Salud, y de Medio Ambiente y Recursos Naturales, para que realicen estudios que permitan tomar acciones para incrementar el caudal del río Pánuco.
Además, urgió a la Comisión Nacional del Agua a que solucione la falta de agua potable y garantizar este servicio básico a las y los tamaulipecos.
En su propuesta, turnada a la Tercera Comisión, Villarreal Anaya señaló que la contaminación del agua ha sido provocada por la presencia de desechos domésticos, el retorno del agua de sistemas de riegos, así como actividades relacionadas con la minería, industria del petróleo y el depósito de desechos industriales en el río.
Desafortunadamente, dijo que las lluvias en la región aún no representan una recuperación para el río, por lo que, de no tener abundante precipitación en la zona, habrá repercusiones devastadoras para el ecosistema, la economía y la salud de la ciudadanía.
Refirió que el alto nivel de salinidad en este cuerpo de agua ha provocado la muerte de distintas especies marinas, por lo que los pescadores tienen que trasladarse más lejos para poder desarrollar sus actividades.
El senador puntualizó que la disminución del caudal también ha generado que las aguas saladas lleguen a los hogares por medio de las tuberías, por lo que las familias tamaulipecas deben adquirir agua potable directamente de purificadoras, lo cual ha encarecido este producto hasta en 30 por ciento más del precio normal.
