Llama Ricardo Monreal a eliminar las tentaciones que pretendan destruir el Estado de derecho

 

Ante los desafíos de este país, uno de los más apremiantes es superar el dolor de una sociedad lastimada por la delincuencia, la inseguridad y las fallas de un sistema de procuración de administración de justicia.


En el marco del Día del Abogado, el presidente de la Junta de Coordinación Política del Senado de la República, Ricardo Monreal, hizo un llamado a eliminar las tentaciones que pretendan destruir el Estado de derecho, ya que es lo único que garantiza la convivencia armónica y pacífica.

Ante los desafíos de este país, uno de los más apremiantes es superar el dolor de una sociedad lastimada por la delincuencia, la inseguridad y las fallas de un sistema de procuración de administración de justicia.
Por ello, el también doctor en Derecho y académico de la UNAM señaló que los abogados tienen que trabajar para lograr los cambios necesarios en la Constitución, en la ley, en las instituciones públicas que conforman el sistema de procuración y administración de justicia, para asegurar el respeto al Estado de derecho.
El papel de los abogados, visto por el también profesional del derecho, es de una enorme responsabilidad frente a México, especialmente durante la nueva etapa política y en la que el reconocimiento de los pendientes del sistema de justicia resulta impostergable su actualización.
Del trabajo de los abogados depende que la impunidad, que se ha anidado y que ha imperado por más de dos décadas en nuestro país, sea desterrada.
Ricardo Monreal reconoció que no es un camino sencillo, porque la historia demuestra que contribuir a los grandes cambios a favor de las sociedades, es una larga, sinuosa, difícil vía y ruta, mientras que destruirlos puede tomar instantes, pero construirlos décadas o cientos de años.

 

 

Al mencionar a las tentaciones que se pueden caer, si revisamos nuestra historia, podemos encontrar varios episodios que indican el fallo de algunos de los actores políticos de la época, quienes empezaron bien, pero en el camino, tergiversaron sus ideales.
Tal es el caso de Porfirio Díaz, quien a pesar de que se formó en el mismo Instituto que Benito Juárez, con ideología liberal en un principio, en el camino sus intereses personales y el de quienes lo acompañaron, se empañaron y prefirieron relegar el bien de la nación, dando paso a la etapa de mayor autoritarismo de México.
Expresó que Juárez sentó las bases del Estado mexicano moderno, siendo un ejemplo de vida, que demuestran que en los momentos coyunturales y las grandes transformaciones de este país han estado en gran parte sustentado en la actuación de abogados y abogados, de perfil progresista y liberal, profesionales que como el Benemérito de las Américas, dedicaron su vida al estudio y a la aplicación de la norma, para lograr la evolución de México, a uno más justo y equitativo.