Abordan vida de Berlioz y “La condenación de Fausto” en Bellas Artes

México, 19 Feb (Notimex).- Como parte del ciclo de pláticas organizadas por la Ópera de Bellas Artes, el cronista y crítico de ópera Francisco Méndez Padilla ofreció una charla sobre el compositor francés Hector Berlioz, autor de “La condenación de Fausto”.

Será este año cuando se conmemore el 150 aniversario luctuoso del máximo exponente del Romanticismo francés y como parte de la celebración se presentará la obra en el Palacio de Bellas Artes, con la actuación de los cantantes Arturo Chacón, Denis Sedov, Nora Sourouzian y Ricardo López.

“Abordar la figura legendaria del viejo doctor Fausto con las cuestiones ontológicas es muy extenso, aborda por ejemplo la atracción que siente la humanidad por la figura del diablo. Hector Berlioz es sin duda uno de los máximos representantes del Romanticismo francés”, expresó.

Francisco Méndez expuso que Héctor Berlioz fue enviado a París a los 18 años de edad para estudiar medicina, y fue hasta 1826 cuando realizó sus estudios de música en el Conservatorio de París.

“Para que el joven compositor pudiera estudiar música sus padres le impusieron la condición de obtener el Gran Premio de Roma destinado a apoyar a los artistas en diversas categorías. Fue Napoleón Bonaparte quien en 1803 añade el reconocimiento a los músicos”.

El crítico destacó que el premio era muy importante en aquel tiempo porque los que ganaban eran considerados como destacadas promesas, “fue tras cuatro intentos cuando Hector Berlioz obtuvo el premio a los 27 años y en 1830 estrena su sinfonía”.

“La vida del compositor fue un esfuerzo continuo por buscar la aprobación de su trabajo ante sus contemporáneos. Hector maneja una enorme masa orquestal y melodías con el estilo francés, expresa los sentimientos a través de maravilloso textos y una magnífica voz y sensibilidad”.

Para concluir la charla, Francisco Méndez explicó que “La condenación de Fausto” es una obra musical para orquesta, voces solistas y coro, que se estrenó el 6 de diciembre de 1846.

“Es una obra concebida para ser tocada y cantada en versión de concierto, aunque años después de la muerte del compositor se la haya representado en ocasiones en versiones escénicas de ópera y de ballet”, añadió.

 

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