Antonio Sánchez rechaza crueldad de EU a migrantes a ritmo de jazz

Antonio Sánchez
Antonio Sánchez 

*El baterista mexicano capta en su disco Lines in the sand dramáticas historias Por Claudia Pacheco Ocampo Desde 1993, el músico Antonio Sánchez ha sido testigo, de manera directa, del abuso que las autoridades estadounidenses cometen contra los migrantes: los golpean, los humillan, los deportan y los separan de su familia sin ninguna consideración. Son imágenes que […]


*El baterista mexicano capta en su disco Lines in the sand dramáticas historias

Por Claudia Pacheco Ocampo

Desde 1993, el músico Antonio Sánchez ha sido testigo, de manera directa, del abuso que las autoridades estadounidenses cometen contra los migrantes: los golpean, los humillan, los deportan y los separan de su familia sin ninguna consideración.

Son imágenes que han afectado su vida luego de haber decidido radicar en la Unión Americana y que hoy plasma, como también reclama, a través de su disco Lines in the sand (Líneas en la arena), al que define como muy cinemático porque evoca la complejidad de la experiencia del migrante.

“Tristemente, hay tantos ejemplos de gente que por su perfil racial está siendo maltratada por la policía. No me fue nada difícil encontrar una gran variedad de instancias capturadas en audio y video, con las cuales hice un collage bastante dramático para empezar el disco”, explicó Sánchez en entrevista con Notimex.

Ese collage capta los momentos en que agentes migratorios separan a las madres de sus hijos. Se escucha el “por favor, no lo haga, tenga piedad”; también se oyen los gritos de auxilio, su llanto, su dolor sin consuelo y muchas veces sin final. La sociedad estadunidense se aprovecha del estatus ilegal del migrante para explotarlo

El objetivo del prestigiado baterista fue crear algo que incomodara al escucha, a fin de poner en perspectiva lo horrible e indigno que puede ser el trato hacia la gente según el color de su piel y su aspecto físico.

“En Nueva York existe una cantidad extraordinaria de migrantes. Jackson Heights, el barrio donde vivo en Queens, es uno de los más diversos del mundo. Ahí se hablan más de 165 lenguajes. En su mayoría, los migrantes son gente extremadamente trabajadora que busca una mejor calidad de vida”, dijo el músico.

Sin embargo, Antonio Sánchez manifestó que su existencia ahí es muy dura porque la sociedad se aprovecha de su estatus ilegal para explotarlos de muchas maneras.

“Ahora se vive con más miedo y más rencor hacia el gobierno. Es obvio que Donald Trump ha creado un ambiente muy hostil para el migrante pobre y de tez morena. Ha estado sistemáticamente alienando y politizando a esta gente en el nombre de un populismo completamente falso y torcido”, reconoce el músico.

Trump, un cáncer muy grave

Antonio Sánchez, ganador del premio Grammy a la Mejor Composición Instrumental por Birdman, consideró que el presidente de Estados Unidos es realmente “un cáncer muy grave en la sociedad americana y que, desgraciadamente, tiene repercusiones serias en todo el mundo”.

Toda esta atmósfera se percibe, se siente y se vive a través de Lines in the sand, álbum en el que logró agrupar a los músicos de su grupo Migration y en el que sobresalen el pianista John Escreet, Matt Brewer (bajo), Chase Baird (saxofón y Ewi, que es Electronic wind instrument), así como Chase Baird en la voz. En los efectos está su esposa Thana Alexa.

“Me gusta componer música cinemática, que tenga muchos matices y evoque emoción. Las armonías y melodías están pensadas para este fin. Hay un par de temas que duran más de 20 minutos porque pasan por una variada cantidad de atmósferas y secciones diferentes. Me gusta contar una historia y que el público se envuelva con ella”, dijo el también baterista.

Compite con los grandes del jazz

Antonio Sánchez se fue de México a Estados Unidos hace 26 años para estudiar música en Berklee College of Music y porque sabía que no había una escuela de ese nivel en su país natal.

“No estaba seguro de lo que me iba a deparar el futuro, pero lo que sí sabía es que deseaba tocar al más alto nivel y con los músicos más trascendentes del medio”, afirmó Sánchez.

Si bien el camino no ha sido fácil, Antonio Sánchez, a sus 47 años, asegura que se han rebasado todas sus expectativas. “Lucho con abrirme camino como un mexicano que quiere tocar jazz.

“Generalmente los latinos que están en el ambiente tocan jazz latino o música que tenga raíces latinoamericanas, pero la música que yo he venido haciendo desde hace algún tiempo tiene influencias de todo tipo y no puede ser clasificada como latina. Por lo tanto, estoy compitiendo directamente con los grandes del género jazzísitico en Estados Unidos”, resaltó el músico.

Los mexicanos, históricamente hablando, “no han creado un lugar consistente en la escena del jazz internacional todavía y eso ha hecho el viaje más intenso, pues trato de cortar brecha y hacer una vereda para otros músicos que vienen detrás”.

El músico mexicano en Estados Unidos, dice, lucha por ser tomado en cuenta como una fuerza digna en la escena del jazz mundial y le llena de orgullo porque muchos de ellos hacen grandes cosas para poner el nombre de México en el mapa y de manera contundente.

“El jazz y el arte en general, son excelentes vehículos para expresar descontento con la situación actual. El arte es un reflejo de la realidad y, en estos momentos, la realidad parece una mala película de Hollywood”, dice el jazzista.

Antonio Sánchez ha ganado cuatro premios Grammy, pero siempre como integrante de alguna agrupación. Fueron tres preseas con Pat Metheny y uno con Michael Brecke.

Cuando creó la banda sonora de Birdman fue nominado a los Globos de Oro, los BAFTA, Critics’ Choice Movie Awards, Hollywood Music In Media Awards, Premios Satellite, Crítica de Washington DC y la Sociedad de Críticos de Phoenix.

“Birdman me abrió muchas puertas. Hizo que mi nombre resonara en otras esferas del ambiente de la música y el entretenimiento. El Grammy que gané, también hizo que yo circulara en la Academia Nacional de Artes y Ciencias Americana (NARAS), lo cual influyó para que mi álbum Bad hombre fuera nominado al Grammy el año pasado”.

El artista también ha hecho la música de las películas Hippopotamus (2017) y Política: Manual de Instrucciones (2016). Ahora trabaja en la tercera temporada de la serie de televisión Get shorty.

Con el cineasta Alejandro González Iñárritu sigue en contacto, por lo que no descarta volver a colaborar con él o con alguno de los otros directores mexicanos que, considera, están cambiando la manera de hacer cine.

“La satisfacción siempre es pasajera. Si uno realmente siente que ha llegado a la cúspide y que ya no hay nada más que lograr, entonces es mejor pensar en el retiro. Mi meta es establecerme como un artista que siempre se mantiene innovando, activo, vigente y trascendente.

“La competencia es enorme, pero eso me ha hecho crecer muchísimo. Tocar por más de 20 años con los grandes del jazz, me ha enseñado cosas que no tienen precio. Me siento orgulloso de lo que he logrado hasta ahora, pero el camino es muy largo para consagrarse como uno de los grandes y todavía me falta mucho”, afirmó el músico.

Antonio Sánchez prevé viajar a México en diciembre próximo para presentar en concierto su disco Lines in the sand.