Comunidad dancística expresa inquietudes en consulta

 

Alrededor de 690 personas expresaron su opinión para formar el Plan Nacional de Danza


Distribución equitativa de los apoyos, un inminente ejercicio de transparencia de quienes dirigen y administran las instituciones y los programas culturales y dancísticos, así como la implementación de leyes, acuerdos, convenios que posibiliten condiciones dignas de trabajo, son algunas de las inquietudes que la comunidad dancística del país del externó como resultado de la consulta realizada para la elaboración del Plan Nacional de Danza.

De cuerdo con el documento, a la consulta respondieron 690 personas, con distintos perfiles profesionales en danza; participaron de 206 ciudades y de los 32 estados de la República Mexicana.

Larga es la lista de inquietudes, preocupaciones y propuestas que surgieron de este muestreo; sin embargo, la mayoría coincidió en evidenciar seis situaciones urgentes por atender:

La primera preocupación tiene que ver con una distribución equitativa de los apoyos, contemplando las características específicas de los distintos géneros dancísticos. A lo anterior se suma la petición de un inminente ejercicio de transparencia de quienes dirigen y administran las instituciones y los programas culturales y dancísticos, para superar el sentimiento de desigualdad y de corrupción que se alude en el hecho de que los recursos estén concentrados en algunas zonas del país, en algunos géneros de danza y en pocos beneficiarios.

Otro foco rojo para los encuestados es la implementación de leyes, acuerdos, convenios que posibiliten condiciones dignas de trabajo, contemplando el derecho a la seguridad médica, vivienda, préstamos y jubilación.

La cuarta inquietud/petición es la integración de la danza como materia en todos los niveles educativos y un programa de fortalecimiento de la identidad cultural desde la danza a nivel nacional.

Una gran inquietud para la comunidad dancística es la generación de empleo y diseño de estrategias que posibiliten la sustentabilidad económica de quienes ejercen una profesión en danza, con la articulación de instituciones educativas, culturales, de trabajo, de economía, así como a la iniciativa privada y los integrantes del campo de la danza.

Finalmente, los participantes hacen un llamado a la simplificación de trámites burocráticos, contratos de trabajo de acuerdo con los servicios que ofrecen los artistas y trabajadores de la cultura, y cumplimiento de pagos y retribuciones económicas en tiempo y forma.

A decir de los gestores que impulsaron la consulta, las respuestas obtenidas hacen un énfasis claro de las problemáticas enunciadas por los participantes con un carácter de mayor importancia y urgencia, mismas que deberán de resolverse como prioridad en el diseño de planes, programas, asignación de recursos y de personal a cargo.

La necesidad de contribuir a generar un cambio a fondo en la política pública cultural, específicamente en el ámbito dancístico, motivó a un grupo de gestores e investigadores a realizar una consulta que recogiera el sentir de este gremio.

Encabezados por Erandi Fajardo Robledo, Laurencia Strada López y Javier Contreras Villaseñor, el proyecto tuvo como idea darle voz a todos aquellos involucrados en el arte del cuerpo en movimiento para generar un termómetro de lo que está aconteciendo en este gremio artístico y así tener una base para generar un Plan Nacional de Danza que permita mejorar los organismos, planes y programas, perfiles de representantes y funcionarios públicos en cuanto a lo que obedece al campo de la danza.

Dicho ejercicio de participación ciudadana están a disposición de todos los interesados en el tema. Incluso, señalan, han sido entregados a todas las autoridades responsables de la cultura en México.

Metodología

Para la realización de esta consulta se hizo una campaña (del 14 de agosto al 30 de septiembre del 2018), en redes sociales y por correo para invitar a sumarse a la demanda de un plan y al llenado de la consulta.

Cabe destacar que, para su diseño, los gestores revisaron documentos como el Plan Nacional de Colombia y el proyecto para el Plan Nacional de Uruguay. Asimismo, recibieron asesoría de colegas con perfiles de coreógrafos, bailarines, maestros, investigadores, productores, directores de festivales, agrupaciones y academias de danza de distintos géneros y de distintas partes de nuestro país.

Las respuestas se obtuvieron mediante un formulario en línea con invitación abierta a todo el sector. Los resultados ya han sido plasmados en un documento electrónico y, con la finalidad de facilitar la lectura de los resultados, se generaron síntesis de las respuestas de cada una de las preguntas, pero también se muestran citas completas de sus respuestas y precisiones en demandas concretas por perfil de participantes.

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