El Estado, obligado a proveer de recursos a la cultura: Arturo Ripstein

* El cineasta, próximo a estrenar El diablo entre las piernas, se dice orgulloso de exportar el arte fílmico y no la violencia de México

Por Maricruz González May

México, 28 Jun (Notimex).- El cineasta Arturo Ripstein, Premio Nacional de Ciencias y Artes 1997 en el área de Bellas Artes, aseguró que México ocupa un importante lugar en la prensa internacional por dos cuestiones: la violencia y su cultura, por lo que opinó que es obligación del Estado seguir dotando de recursos a los artistas y creadores para exportar cosas más favorables.

En entrevista con Notimex a propósito del lanzamiento del cartel de su más reciente película El diablo entre las piernas, Ripstein mencionó que cuando este país aparece en todos los periódicos del mundo es por catástrofes, desastres o atrocidades y, en el sentido positivo, lo hace por cultura.

“México ha salido mucho en los periódicos, en la internacionalidad, gracias al horror y a la cultura, y por qué camino quiero irme yo: Por el de la cultura, la cultura en serio, tomada en su acepción más rigurosa, no frivolidades”, expresó el realizador de 75 años.

Comprometido con el quehacer cinematográfico, Ripstein sostiene que ante las adversidades que enfrenta el sector cultural prefiere ser cauteloso con sus palabras para no hacer lo que muchos que tienen una cámara y un micrófono enfrente, “hablar por hablar y sin conocimiento de causa”.

No obstante, el realizador que debutó como director con la película Tiempo de morir en 1965, expuso: “Estamos luchando todos por mantener los apoyos, mantener el mecenazgo del Estado, que no es una dádiva sino una obligación”.

Con una amplia y reconocida trayectoria tanto a nivel nacional como en el extranjero, ha dirigido más de una veintena de películas y aseguró que ha podido hacerlo gracias a guiones que son viables, “viables dada mi circunstancia, mi posición dentro del cine, etcétera”.

“Yo soy un director viejo, viejo, viejo, y no puedo decir: ‘Hago lo que se me da la gana’, más bien tengo la necesidad de llevar películas, de presentar películas y proyectos, que un productor me diga si es viable hacerlo por su costo (…) Hay que hacer las películas que sí se pueden hacer y los sueños caben en toda clase de tamaños”, consideró.

El sugerente póster de Magallanes

Aún sin fecha para su estreno, la película de Ripstein, El diablo entre las piernas, una de las más esperadas para este 2019, de acuerdo con la crítica especializada, lanzó uno de los dos pósters que tendrá. En la imagen se aprecia el aparato reproductor femenino.

“A mí me parece muy hermosa, de una enorme belleza y muy expresiva”, expuso entre risas.

De acuerdo con el director, se trata de una gráfica sacada de un antiguo libro de anatomía y los números que acompañan la imagen son las descripciones anatómicas del aparato genital femenino.

La cinta, protagonizada por Sylvia Pasquel y Alejandro Suárez, está en la recta final de posproducción. “Ya la terminé de editar y serán los festivales (programadores) los que decidan si la eligen o no. La compañía productora Alebrije se encarga de todo lo que viene”.

El drama de Paz Alicia Garciadiego

En 1985 Paz Alicia Garciadiego, quien en fecha reciente recibió el Ariel de Oro por su trayectoria, se convirtió en la guionista de cabecera de Ripstein y la historia de El diablo entre las piernas no es la excepción.

La trama, compartió la guionista, “tiene que ver con los celos y el proceso de deterioro de una pareja que empieza a estar aislada del mundo. Esta historia surge a partir de unos amigos que nos contaban que los celos de un hombre se detonaron con la presencia del Alzheimer.

“Él nunca había sido celoso y un buen día se volvió un celoso absurdo y decidí escribirlas, porque son historias que me gustan, pero no desde la perspectiva que vemos en el cine, donde los ancianos son muy dulces. A mí me gustan más los personajes que son contradictorios, si no me aburren”, agregó.

La egresada de la Facultad de Filosofía y Letras de la Universidad Nacional Autónoma de México (UNAM) puntualizó que su personaje no tiene Alzheimer, “porque yo quería una película en la que el deterioro no fuera producto de la enfermedad, sino de la vejez y el aislamiento en el que van cayendo las parejas”.

El largometraje es protagonizado por la actriz Sylvia Pasquel, quien da vida a “Beatriz”, una mujer que sufre maltrato por parte de su celoso esposo, pero no huye de su lado porque han creado una codependencia y, al menos ella, no concebiría su vida de otra manera.

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