Había una vez un hoyo funky

Localizado en el bajo puente de Circuito Interior de la colonia Condesa, en la Ciudad de México, Bajo Circuito Multiforo Urbano es un espacio recuperado que nació bajo la firme idea de brindar un refugio a la cultura y arte que no encuentra lugar en los grandes recintos, presentando los proyectos de artistas y creadores emergentes de todo el país.

“Es un multiforo cultural que se creó hace casi tres años y medio. Un lugar que tiene desde sus inicios la misión de abrir el espacio para que, lo que justamente era un hoyo funky y un lugar inhabitable, se convirtiera en un centro comunitario y de cultura que abre sus puertas a todo el mundo para que vengan a expresar lo que necesiten o quieran”, abundó Jorge Eduardo Zúñiga, director general y fundador de Bajo Circuito Multiforo Urbano.

A lo largo de sus primeros tres años, Bajo Circuito ha presentado más de 2 mil proyectos culturales que van desde teatro, cine e improvisación, hasta música; es decir, de acuerdo con su director, “todo lo que pueda representar cultura”.

“Bajo Circuito está dirigido para todo el mundo, tiene un espectro enorme porque puedes venir a ver desde un espectáculo para niños, hasta una orquesta barroca, e incluso a artistas de la talla de Geo Meneses o la Sonora Dinamita”, precisó.

Con un aforo máximo para 400 personas, Bajo Circuito se rige bajo un consejo curatorial interno que selecciona y dictamina los proyectos artísticos que pueden presentarse en el escenario.

“Todo lo que nos llega a la página web se analiza y se le va dando oportunidad. De HABÍA UNA VEZ UN HOYO Cumple tres años Bajo Circuito, foro cultural recuperado abajo de un puente Bajo Circuito está dirigido para todo el mundo, tiene un espectro enorme, porque puedes venir a ver desde un espectáculo para niños y una orquesta barroca, hasta a artistas de la talla de Geo Meneses o la Sonora Dinamita” Eduardo Zúñiga Promotor cultural APUNTE PROYECTOS A lo largo de sus primeros tres años, Bajo Circuito ha presentado más de 2 mil proyectos culturales que van desde teatro, cine e improvisación, hasta música; es decir, de acuerdo con su director, “todo lo que pueda representar cultura”. finitivamente y gracias a que Bajo Circuito se ha convertido en un gran espacio, no le podemos dar lugar a todos los proyectos, porque son demasiados, pero tratamos en lo posible de agendarlos hacia delante, para que puedan pisar el escenario”, explicó.

Sin apoyo de algún ente de gobierno, el espacio cultural alternativo se ha consolidado como un foro importante en la escena de México que apoya a miles de artistas emergentes cada año.

Para celebrar sus primeros tres años, Bajo Circuito alista una semana de eventos especiales, hasta el 4 de febrero, que incluyen conferencias y master class, un jam Knight, presentaciones musicales para niños, conciertos, dj’s, así como un lugar para standuperos y comediantes.

Con una visión hacia el futuro, Zúñiga no descartó la posibilidad de expandirse a otro bajopuente, con el objetivo de seguir brindado más espacio a la cultura y el arte.

“Sería increíble contar con otro espacio de estas mismas características en la Ciudad de México. Estamos en la búsqueda y tocando puertas para ver si podemos abrir otro Bajo Circuito al sur o norte de la capital, pero todavía no hay planes cercanos para eso”, dijo Zúñiga.