Indignan a Nailea Norvind recortes al sector cultural

 

* La actriz asegura que la riqueza artística de México es admirada en todo el mundo  Por Verónica Pérez Raigosa México, 9 Jul (Notimex).- Vergüenza e indignación es lo que siente Nailea Norvind por los recortes presupuestales al sector cultural, porque dijo que como actriz ha vivido en carne propia las consecuencias, sin embargo, no pierde las […]


* La actriz asegura que la riqueza artística de México es admirada en todo el mundo 

Por Verónica Pérez Raigosa

México, 9 Jul (Notimex).- Vergüenza e indignación es lo que siente Nailea Norvind por los recortes presupuestales al sector cultural, porque dijo que como actriz ha vivido en carne propia las consecuencias, sin embargo, no pierde las esperanzas de que esta situación se revierta.

En más de cuatro décadas de trayectoria, ha participado en proyectos con grandes presupuestos, pero también en producciones independientes en las que los recursos son muy limitados y requieren de apoyo.

“Es difícil lo que está pasando y realmente me provoca vergüenza este recorte al gasto en las artes, porque tenemos una riqueza cultural que es admirada en el mundo en diferentes disciplinas, no sólo el cine. Yo pienso que un pueblo sin cultura no tiene identidad y ésta es parte de nuestra existencia, por lo que guardo las esperanzas de un cambio”, afirmó en entrevista con Notimex.

Como ejemplo de lo anterior, Nailea mencionó la obra Forcados. Un viaje sin destino, dirigida por Marco Vieyra, que ha enfrentado una ardua lucha por llegar a la cartelera, aun cuando ha demostrado ser diferente e innovadora.

“Es mucho trabajo levantar un proyecto artístico hoy en día”, admitió la actriz sentada en un pequeño camerino en la sala ‘Xavier Villaurrutia’, del Centro Cultural del Bosque, que actualmente alberga la puesta en escena.

“El teatro siempre ha sido el lugar donde yo exploro, crezco y me arriesgo más, además de que me permite ser lo más propositiva posible. El arte me nutre”, comentó la actriz, quien en su infancia soñó con ser científica o veterinaria, pero finalmente llegó a los escenarios, aunque esto fue casual.

“Yo llegué a los escenarios por casualidad cuando tenía seis años, en ese entonces mi madre (Eva Norvind) ya no era actriz, la vedette que México conoció, porque eso fue antes de que ella decidiera embarazarse”, recordó la nieta del príncipe ruso Paulovic Chegodayef.

Casa de muñecas fue la obra que la vio nacer, “empecé en este camino explorando y jugando como todo niño, porque yo creo que los niños no deben estudiar actuación, deben ser naturales, porque eso es lo mejor que nos ofrecen.

“Ese fue mi inicio y ya nunca paré”, dijo la actriz, quien aún recuerda esa experiencia en el Teatro Polyforum que la hacía sentirse como una burbuja de luz, acompañada de primeros actores como Claudio Brook, Ricardo Blume, Ada Carrasco, entre otros.

Su paso por diversos géneros

Sin proponérselo, poco a poco fue llamada para otros proyectos, pero su madre también se aseguró de hacerla consciente de que había que preparase para ser una artista en toda la extensión de la palabra, lo que le permitió hacer mucho teatro musical.

“He navegado entre el movimiento artístico independiente y las producciones de grandes presupuestos como Sr. Ávila. También formé parte del elenco de Muerte súbita, dirigida por Francisco Franco, o bien Electra, que fue otro logro porque se trató de la primera pieza que hice de teatro universitario. En cada uno de estos trabajos puedo decir que he dejado algo de mí”.

En cine recordó que La otra familia, de Gustavo Loza, significó un reto por el argumento, que en su momento abrió el debate sobre los diferentes tipos de familias que existen. “Aún me sorprende que México esté rezagado en estos temas”.

En la pantalla chica dijo que tiene gratos recuerdos, ya que ha intervenido en producciones que han dejado huella no sólo en el público, sino también en ella, como Quinceañera, telenovela en la que interpretó a “Leonor”, su primer papel de importancia y cuya historia fue icónica, ya que marcó a adolescentes de finales de los 80.

A ésta le han seguido títulos como Cuando llega el amor, Abrázame muy fuerte, La candidata, con las cuales ha sido premiada, así como Para volver a amar, Muchacha italiana viene a casarse, entre otras.

En televisión consideró que Mujeres asesinas también fue pieza clave en su desarrollo profesional, porque le permitió salir del encasillamiento en el que estaba con los melodramas, además de que es un parteaguas de lo que hoy son las series nacionales.

Su mejor papel…

Con casi medio siglo de vida, Nailea reconoció que disfruta de las cosas pequeñas e íntimas, lo cual ha transmitido a sus hijas Tessa Ía (actriz y cantante) y Naian (actriz y violinista).

“Ellas saben cómo expresar ese amor a los que estiman. Mis hijas son sabias y como yo nunca he pretendido ser perfecta, puedo mostrarles los errores en los que he caído para que ellas los observen y elijan.

“En mi casa siempre he buscado la comunicación y les he dicho que no tengan miedo de contarme sus cosas, y a la fecha todo lo platicamos. Siempre hablamos en mi camota y analizamos de dónde vino el error y ha funcionado”, aseguró sonriente.

“Nunca me conformo, soy eternamente insatisfecha, podría ser una cualidad, pero también un defecto, lo único cierto es que ser madre es lo que más me gusta y es mi mejor papel en la vida”, concluyó la mexicana de ascendencia noruega.

 

NTX/VPR/ACJ