Jennette McCurdy sigue dando de qué hablar por su nuevo libro I’m Glad My Mom Died, en donde ha revelado algunos de los abusos que vivió al ser una estrella infantil, pero también dedicó un espacio para hablar de Ariana Grande.
Esto debido a que ambas fueron co-protagonistas del programa de comedia juvenil Sam & Cat; no obstante, Jennette lo habría pasado muy mal durante la grabación e incluso se llegó a sentir celosa de la cantante.
Los celos de Jennette McCurdy a Ariana Grande
La exactriz comienza el relato de esta etapa indicando que en un inicio el show iba a ser completamente suyo, pues la empresa le había vendido la idea de que por primera vez tendría un programa donde iba a ser la protagonista.
Sin embargo, esto no fue así, ya que tuvo que compartir escena con Ariana Grande, lo que además llevó a cambiar el concepto principal del programa que tendría Jennette McCurdy en solitario.
“Se suponía que era ‘Just Puckett’, la desgarradora historia de una delincuente juvenil descarada que se convierte en consejera escolar. Ahora, es un juego de dos manos: ‘Sam & Cat’, una delincuente juvenil descarada que, con su ‘tonta mejor amiga’, inicia una compañía de niñeras. No es desgarrador”, compartió.
No obstante, este solo fue el inicio de una situación que empeoró, ya que el trato que le daban a Ariana Grande era diferente al que McCurdy recibía en la producción, ya que a ella no la dejaban filmar ni hacer otros proyectos; mientras que su compañera sí.
De esta forma, describió a Ariana como “una floreciente estrella del pop” que en ocasiones se ausentaba para “ir a cantar en entregas de premios, grabar nuevas canciones y presionar para su próximo álbum”, mientras ella esperaba a que volviera para seguir filmando.
Esta situación molestaba a Jennette McCurdy, ya que ella tenía que rechazar películas o proyectos debido a que la producción nunca le permitió salir para grabar o hacer alguna otra actividad profesional; mientras que a Ariana sí.
Y, aunque ella comprendía los motivos por los cuales su compañera se ausentaba, la situación no le agradaba, lo cual empeoró cuando Ariana Grande tuvo que faltar una semana a las grabaciones.
“La semana en la que me dijeron que Ariana no estaría en absoluto, y que escribirían sobre su ausencia en un episodio encerrando a su personaje en una caja fue como… Estás bromeando. ¿Tengo que rechazar películas mientras Ariana está fuera en los Billboard Music Awards? A la mierda”, escribió en su libro.
Además, aseguró que comenzaba a sentir celos de ella, ya que mientras la cantante comenzaba a despegar su carrera y triunfaba, Jennette McCurdy no podía acceder a las mismas oportunidades.
“Y con frecuencia cometo el error de comparar mi carrera con la de Ariana. No puedo evitarlo. Estoy constantemente en el mismo ambiente que ella, y ella no trata exactamente de ocultar sus éxitos”, escribió.
Sin embargo, todo fue en picada cuando Ariana Grande regresó contenta al set de grabación debido a que había estado jugando “charadas” con el premiado actor Tom Hanks.
“Ariana entró silbando de emoción porque había pasado la noche anterior jugando en la casa de Tom Hanks. Ese fue el momento en que me quebré. No podía soportarlo más”, señaló en su libro.
Lo anterior, debido a que ella asegura que podría superar todo, pero no que Ariana hubiera tenido la oportunidad de convivir con él: “Nunca me agradó. No podía agradarme. El éxito de una estrella pop podía manejarlo, pero ¿pasar el rato con el Sheriff Woody, con Forrest Fucking Gump? Esto ha ido demasiado lejos”.
Fue este el punto de quiebre de Jennette McCurdy, pues desde ese momento su enojo y celos incrementaron: “ahora, cada vez que falta al trabajo, se siente como un ataque personal. Cada vez que le sucede algo emocionante, siento que ella me privó de tener esa experiencia”, reveló.
