Nostálgicos, poéticos y un poco friolentos

 

Se despide de la CDMX el gran espectáculo de los payasos rusos


En el espectáculo Slava’s Snow Show —que actualmente se presenta en la Ciudad de México, luego de dos años de ausencia— no existe una trama específica, pero sí la historia de un payaso trágico que, a punto de cometer suicidio, le ocurre una serie de fenómenos que harán de su vida una avalancha de emociones del tamaño de la espectacular tormenta de nieve que, literalmente, azota en todo el teatro al final de la puesta en escena.

Se trata de una serie de postales protagonizadas por Slava, el icónico payaso amarillo de barba blanca y nariz roja, mientras abandona la miseria, que posteriormente es acompañado por otros siete payasos vagabundos que cruzan sus fantasías hasta convertirlas en una realidad que se queda en el espectador como un mensaje de esperanza.

En entrevista con CAPITALMEDIA, Artem Zhimolokhov y Georgiy Dehyev, dos de los actores rusos que participan en este proyecto y dan vida a los clowns vagabundos, definen a Slava’s Snow Show como una puesta en escena que logra conectar majestuosamente con los sentimientos de su público y los transporta a un mundo que sólo ellos conocen.

“La gente viene para poder vivir otra vez este mundo que estamos intentando recrear en el escenario, para regresar un poco a estas emociones olvidadas, como sentirte un poco niño, jugar con la nieve, con las pelotas, cosas que no siempre suceden así con tanta facilidad”, comenta Dehyev.

Y es que, según los actores del show que se ha vuelto una tradición en México, desde que se presentó por primera vez en 2006, el porcentaje de los espectadores que regresan es muy alto, y no sólo aquí, sino en la mayoría de los 25 países que han visitado.

“Las personas quieren vivir otra vez algo que ya han vivido, porque el espectáculo se trata de cosas y temas muy reales, como tu primer amor, la amistad, el primer encuentro con algo que te hace sumamente feliz y, afortunadamente, nosotros les damos esa oportunidad”, asegura por su parte Zhimolokhov.

Para los integrantes de este emotivo espectáculo, lo más importante es transmitir energía y hacer que los asistentes puedan conectar con alguno de los personajes y que éste, a su vez, pueda ayudarlos a sentir una emoción propia, algo que, según los actores, ningún gadget, por más actual que sea, puede lograr.

“Una vez, durante un espectáculo, sonó un teléfono celular en medio del público, entonces, mis compañeros, con toda la naturalidad actoral que poseen los clown, bajaron a la sala, se llevaron el teléfono de esta persona y se lo empezaron a comer, y fue una parte memorable de aquél show”, relata Zhimolokhov.

Quienes dan vida a Slava’s Snow Show tienen muy claro que el teatro tiene una misión que no se limita a entretener a un público, es por ello que, coinciden, en cada presentación van más allá y buscan hacerte pensar en cosas en las que nunca te habías detenido.