La ciencia descubre que la miel cura heridas

 

Contiene un péptido que ayuda a la cicatrización


Durante años, la miel de las abejas ha sido utilizada como uno de los principales remedios naturales para aliviar enfermedades como la gripe, los dolores de garganta y la tos. Tras varios estudios la ciencia ha descubierto que esta sustancia es de gran ayuda en la curación de heridas gracias a sus propiedad antisépticas.

Especialistas de la Academia Eslovaca de Ciencias llegaron a la conclusión de que la miel y la jalea real poseen propiedades que ayudan a la cicatrización de heridas.

Los estudios revelaron que el ingrediente responsable es nada menos que un péptido llamado defensina-1, que también se puede encontrar en humanos, plantas y animales.

La defensina de las abejas y está tanto en la miel como en la jalea real se probaron en la espalda de 20 ratas heridas. Con este experimento se comprobó que este activo ayudó a cicatrizar más rápido las lesiones de estos animales.

Los resultados sugieren que la defensina cuentan con propiedades que acelera la formación de cicatrices para curar heridas.

AG