El síndrome mielodisplásico (SMD), la enfermedad que causó la muerte del actor Gonzalo Vega, es un padecimiento que se origina en la médula ósea.
Se trata de una de las enfermedades sanguíneas más comunes que afecta a personas de cualquier edad, aunque mayormente a hombres mayores de 60 años.
El SMD daña directamente a las células de la médula ósea y provoca problemas en su función de generar células sanguíneas, por ello los blastos que generan los glóbulos rojos, blancos y las plaquetas, no maduran y por tanto, no tienen un correcto desempeño.
Los enfermos suelen descubrir el padecimiento luego de un análisis de sangre rutinario.
Los síntomas tardan en aparecer pero cuando se presentan suelen presentarse señales de anemia, fiebre e infecciones frecuentes, así como sangrados y moretones frecuentes, que en casos extremos pueden llevar a la muerte.
Para tratar el síndrome se suele recurrir a quimioterapia y a un transplante de médula ósea, aunque también se puede llevar un tratamiento a base de fármacos, sobre todo utilizado en pacientes de mayor edad.
El actor recibió un mal diagnóstico de su enfermedad, lo que retrasó su tratamiento, pues fue diagnosticado con leucemia mieloide aguda en un hospital de Houston, EU.
Sin embargo, al solicitar una segunda opinión descubrir que la enfermedad que tenia era el SMD, tras lo cual, en 2014, abrió junto al Dr. López Karpovitch, una fundación con su nombre destinada al apoyo y ayuda de los afectados por ese mal para hacerlo más visible.
Con información de Reporte Índigo
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JCS
