¿Movimiento skinhead en México? Sí hay y así es

 

Platicamos con dos integrantes de este núcleo de identidad: Vespa Wezt, quien es profesor del Tec de Monterrey y Sergio, quien es periodista


Ser skinhead en México “conlleva responsabilidades políticas y musicales“. Por lo menos eso piensa Sergio Iván Moonstop, un skinhead de la colonia Olivar del Conde, quien jamás deja sus tirantes delgados que porta a donde quiera que salga (es periodista) y quien asegura que parte de su idiosincracia es el gusto y respeto por  trabajar, “de lo que sea”.

Para Vespa Wezt, un músico, pincha discos y profesor  del Tec de Monterrey,  ser skinhead es, necesariamente, asumirse como antifascista y como “un amplio conocedor de los géneros musicales reggae, ska, two tone y sus diversas vertientes”.

El movimiento skinhead en México es joven, sus primeros visos de existencia se dieron en los noventas, cuando la música jamaicana e inglesa (reggae, ska, rocksteady, two tone) comenzaron a tomar auge en las ciudades del país.

El movimiento juvenil, nacido en Inglaterra a finales de los sesentas, se afianzó en nuestro país a través de la música, los sound systems, pero también de su vertiente política que tiene que ver con el antifascismo y que diversos colectivos como SHARP (Skinheads contra los prejuicios raciales) defienden con su activismo.

“El colectivo MOLACARA (Movimiento latinoamericano de cabezas rapadas) fue importante en un inicio ya que unió a los skinheads que se encontraban en la Latinoamérica de los ochentas, los empezó a visualizar y a conglomerar en este movimiento que no era tan político, sino más bien unificador”, contó Vezpa.

El movimiento skinhead en México se consolidó en los noventas, amalgamándose en torno a los diversos estilos musicales que llegaron de Jamaica, Inglaterra y Estados Unidos, con presentaciones de artistas de estos países en vivo.

Sin embargo, en nuestro país no todos los skinheads son antifascistas; hay una corriente que defiende la ideología nacionalista.

“Hay skinheads nacionalistas. Tuve la oportunidad de convivir con algunos de ellos. Defienden ideales políticos que tienen que ver con la territorialidad y su defensa, para mí ellos son mis contrarios pues yo soy parte de SHARP y no creo en las fronteras”, narró Vezpa.

“Ser SHARP es estar abierto a otros lugares, a otra forma de pensar, a otras personas. Cuando asistí a una fiesta de nacionalistas me di cuenta de por qué mucha gente  “jalaba para ese lado, y era por lo que les ofrecían en, por ejemplo, sus fiestas: ambiente, chavas guapas, licor, comida”.

Para Sergio el movimiento skinhead nacionalista denota intolerancia, pues se cierran a lo que según ellos necesita la patria… “Siento que los latinoamericanos somos muy intolerantes con nosotros mismos y para mi así son los nacionalistas”.

Muchas veces la gente busca alejarse de la política y se va más al ámbito de la fiesta, de los bailes, del futbol, lo cual en el movimiento skinhead es valido, continuó narrando Sergio, quien agregó que como en otros núcleos de identidad juvenil “la intolerancia entre la banda se hace presente“.

“Sin embargo, todos los que se dicen apolíticos no se dan cuenta de que con su simple actitud o vestimenta, o su cabeza rapada, están asumiendo una postura política. Yo cuando doy clases en el Tec de Monterrey inserto, entre líneas, el discurso antifascista y antirracista que manejo, también en mis charlas y en mis publicaciones en Facebook.

A un skinhead antifascista lo define su gusto por las culturales mundiales, es inclusivo y respeta la diversidad sexual, es tolerante y apoya la equidad de género y su gusto por la música jamaicana es fundamental”, explicó Vespa.

“La música, el adquirir discos para pinchar, me ha dejado muchas veces sin comer; los discos son caros y la mayoría son de exportación y, por ejemplo, en subastas de eBay llegan a alcanzar los 50 mil pesos“, continuó diciendo el profesor.

“La música no es fundamental, es la estructura básica del movimiento skinhead. Sin música no habría movimiento skinhead. Muchos de nosotros iniciamos escuchando ska mexicano, a los grupos locales, pero no nos cerramos y de repente prestamos oídos a otras bandas como Desorden Público, de Venezuela, o Los Intocables, de Argentina”, afirmó Sergio.

“Somos la generación del Internet y utilizándolo nos damos cuenta que al teclear la palabra ska en la pantalla se despliegan resultados que se remontan a grupos de los sesentas; yo me metí en la música, al rhythm and blues, ska tradicional, reggae y me gustó más que la que se hacía en ese entonces en el país”, complementó el periodista.

“La música crea y recrea sentimientos, hay reggae para todos los momentos y sentimientos de la vida, siempre hay una canción que te va a mover”, aseguró Vespa quien agregó que ha habido momentos en que ha pensado en que puede morir “escuchando una canción de rocksteady“.

“Siento que a las bandas de ska y reggae en México no les faltó nada porque ellos cumplieron una función básica: introducir a la gente a estos géneros, a nosotros y a muchos más que vienen detrás. Los Djs, que tienen sus sound systems, también juegan un papel fundamental, como Roberto de las Torres con King Crab, quien a mi parecer tuvo, y tiene, la función de introducir a la gente nueva al rollo skinhead“, contó Vespa West.

“Un skinhead no nace conociendo todas las canciones jamaicanas e inglesas, pero tampoco se hace escuchándolas. Para ser skin se tiene que conocer la ideología de este movimiento y comprometerse, entrar y quedarse… es para siempre, un modo de vida, no es una cárcel y hay tantas vertientes dentro del movimiento que en realidad nunca te encasillas en ninguna”, afirmó el también Dj.

Para Sergio lo que les faltó a las bandas mexicanas, con algunas excepciones como Inspector, fue tocar más rocksteady, más ska y ser “menos soberbios” pues ya no buscaron experimentar con los géneros que los influenciaron.

“Yo soy skinhead por que necesitó pertenecer a algo con bases históricas y con un discurso político que me mueva (antifascismo), me consideró una persona completa, tengo pareja, trabajo como profesor en el Tec de Monterrey a donde con todo y tatuajes de SHARP, telarañas y cascos de la Trojan me presento a las 7 de la mañana en el aula”, finalizó contado West.

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FF