10% de enfermos con COVID-19 crean anticuerpos que empeoran enfermedad

10% de enfermos con COVID-19 crean anticuerpos que empeoran enfermedad
Foto: Internet 

El estudio ha analizado la sangre de casi 1,000 pacientes con neumonías muy graves provocadas por el coronavirus y la ha comparado con la de 600 infectados asintomáticos o con síntomas leves y con un tercer grupo de 1,200 voluntarios sanos.


Según un estudio internacional ha desvelado que el 10% de las personas con infección grave por COVID-19 producen un tipo de anticuerpos que boicotean su sistema inmune.
Este sería un defecto genético que podría afectar a la producción de la molécula interferón, encargada de alertar al resto del cuerpo cuando uno se contagia.

Es el resultado de un estudio internacional que puede explicar por qué algunas personas pasan la covid sin enterarse o con síntomas muy leves mientras otras desarrollan una enfermedad grave o mortal.

Hasta ahora se conocían tres grandes factores de riesgo: ser hombre, ser mayor y tener enfermedades previas. El trabajo añade una cuarta: defectos genéticos congénitos que pueden impedir que el sistema inmune combata y elimine al virus. Este tipo de problema parece ser mucho más común en hombres que en mujeres.

“Este hallazgo va a cambiar el tratamiento de algunos pacientes”, explica Carlos Rodríguez-Gallego, inmunólogo del Hospital Universitario de Gran Canaria Doctor Negrín y coautor del estudio, que se publica hoy en la revista Science. “Nuestro equipo está estudiando ya cómo establecer ensayos clínicos para identificar a los pacientes que producen este tipo de autoanticuerpos y tal vez tratarlos con otro tipo de anticuerpos para contrarrestar el problema”, señala.

El estudio ha analizado la sangre de casi 1.000 pacientes con neumonías muy graves provocadas por el coronavirus y la ha comparado con la de 600 infectados asintomáticos o con síntomas leves y con un tercer grupo de 1.200 voluntarios sanos. En el 10,2% de los pacientes graves se encontraron anticuerpos que neutralizan al interferón tipo 1, una molécula esencial para lanzar una alarma general cuando un virus entra en nuestro cuerpo.

Minutos después de que el SARS-CoV-2 infecte a una célula se pone en marcha la primera línea de defensa de nuestro sistema inmune. Cuando detectan la presencia del virus, las células dendríticas comienzan a producir una proteína que manda una señal de alarma a todo el cuerpo: el interferón 1. Estos interferones pueden unirse a las células de casi todos los tejidos del cuerpo y modifican su metabolismo para que activen sus mecanismos de defensa antiviral.