Ante uso de plasma para tratar pacientes con Covid-19, OMS pide cautela

Ante uso de plasma para tratar pacientes con Covid-19, OMS pide cautela
 

Un estudio chino demostró que el plasma recibido por personas que aún padecían COVID, no marcó una diferencia en los pacientes hospitalizados, mientras otra investigación mostró que puede reducir el riesgo de muerte.


La Organización Mundial de la Salud (OMS) se mostró con reserva y pidió cautela ante el uso de plasma para tratar pacientes con COVID, pese a la aprobación de este tratamiento en Estados Unidos.

Según mencionaron expertos de la OMS,  la evidencia sobre la efectividad del tratamiento sigue siendo de “baja calidad”.

“Hay una serie de ensayos clínicos en todo el mundo que analizan el plasma convaleciente en comparación con el estándar. Solo algunos de estos han informado resultados provisionales y por el momento, todavía hay evidencia de muy baja calidad“, dijo Soumya Swaminathan, científico jefe de la OMS.

Recientemente Estados Unidos emitió una autorización para el uso de plasma de pacientes recuperados de COVID-19 en personas aún infectadas con el coronavirus SARS-CoV-2.

Fue la Administración de Fármacos y Alimentos de Estados Unidos (FDA) quien autorizó el domingo su uso, después de que el presidente de EU, Donald Trump, culpó a este organismo de impedir el lanzamiento de vacunas y terapias por razones políticas.

El “plasma del convaleciente”, denominado así al plasma obtenido de pacientes recuperados de diversas enfermedades para atender a otros con las mismas, es uno de los tratamientos en los que se enfocan los médicos del mundo para curar a quienes padecen COVID.

Actualmente no existe ningún tratamiento 100 por ciento seguro y efectivo para tratar a los infectados con el coronavirus SARS-CoV-2.

Soumya Swaminathan mencionó que la OMS recomienda este tratamiento como “terapia experimental” y no definitiva, pues aún se evalúa su efectividad.

“Recomendamos que el plasma de convalecencia sea todavía una terapia experimental; debe continuar evaluándose en ensayos clínicos aleatorios bien diseñados”, dijo.

Según la especialista, uno de los desafíos a los que se enfrenta este tratamiento es la variabilidad del plasma, pues este se extrae de diferentes personas, lo que hace se se trate de un producto no estandarizado, a diferencia de los anticuerpos monoclonales elaborados en el laboratorio, lo que podría generar diferentes efectos en quienes lo reciben.

“Hay una serie de efectos secundarios”, dijo Aylward, que van desde fiebre leve hasta lesiones pulmonares graves o sobrecarga circulatoria. Por esa razón, los resultados de los ensayos clínicos son extremadamente importantes”, sostuvo.

Un estudio chino demostró que el plasma recibido por personas que aún padecían COVID, no marcó una diferencia en los pacientes hospitalizados, mientras otra investigación mostró que puede reducir el riesgo de muerte.