Antonio García Conejo propone Ley del Seguro de Desempleo

Antonio García Conejo propone Ley del Seguro de Desempleo
 

Países como Argentina, Chile, España, Estados Unidos y Alemania cuentan con un seguro de desempleo, financiado con aportaciones de empleadores y trabajadores. En nuestro país este programa opera en la Ciudad de México desde hace más de una década; en el Estado de México se anunció hace unas semanas, como apoyo a quienes se han visto afectados por la pandemia.


En beneficio de quienes pierdan su trabajo de manera involuntaria o como consecuencia de alguna emergencia sanitaria, el senador perredista, Antonio García Conejo planteó crear la Ley del Seguro de Desempleo a nivel nacional.
La iniciativa contempla otorgar un apoyo mensual equivalente a 30 días de salario mínimo vigente (3 mil 711 pesos), hasta por seis meses.

“En México tenemos más de un millón de desempleados que en este momento están navegando para comprar las tortillas, pagar la luz y el agua. No es un tema menor. Se dice que en el mundo hay cerca de 200 millones de personas desempleadas”, indicó.
Para contar con este apoyo se creará una “bolsa de ahorro” a la que aportarán el Estado, el patrón y el trabajador, de acuerdo con el salario base de cotización. Si el empleado no hace uso de su ahorro por concepto de seguro de desempleo, éste se sumará a la pensión o se le liquidará globalmente.
“Necesitamos un seguro de desempleo, ¿cómo lo vamos a lograr?, con una cuota donde participe el gobierno con un porcentaje de 1%, el patrón 1% y el trabajador que ponga un 0.25%, es decir, un peso que pudiera aportar el Estado mexicano, un peso el patrón y 25 centavos estaría aportando el trabajador”, explicó Antonio García Conejo.
La Organización Internacional del Trabajo, señaló en 2012 mediante la Recomendación 202, el deber de los Estados de establecer pisos de protección social que incluyan la seguridad básica del ingreso mínimo para las personas económicamente activas que se encuentren en situación de desempleo.
Países como Argentina, Chile, España, Estados Unidos y Alemania cuentan con un seguro de desempleo, financiado con aportaciones de empleadores y trabajadores. En nuestro país este programa opera en la Ciudad de México desde hace más de una década; en el Estado de México se anunció hace unas semanas, como apoyo a quienes se han visto afectados por la pandemia.