INFAMIA PRESIDENCIAL 

Andrés Manuel López Obrador
Foto: Gobierno Federal 

Por: Vladimir Galeana Solórzano Sin lugar a dudas Andrés Manuel López Obrador es un político singular. Y es que el tabasqueño ha sabido colocar por encima de sus yerros y deslices personales una barrera de protección que deja a salvo, su reputación. Y aunque los medios de comunicación han reseñado muchas veces esas lamentables etapas […]


Por: Vladimir Galeana Solórzano

Sin lugar a dudas Andrés Manuel López Obrador es un político singular. Y es que el tabasqueño ha sabido colocar por encima de sus yerros y deslices personales una barrera de protección que deja a salvo, su reputación. Y aunque los medios de comunicación han reseñado muchas veces esas lamentables etapas de su vida política donde ha violentado la legalidad, hasta ahora lo sigue cubriendo el manto protector que ha construido muchos años significandose cómo el “líder antisistema”.

Hasta ahora nunca se ha preocupado por la obediencia de la ley, y desde que ejerce el poder menos, aunque haya jurado guardar y hacer guardar la Constitución y las leyes que de ella emanen, como lo indica el protocolo cuando alguien asume la primera magistratura del país. Y no es que el señor López Obrador cometa esos deslices por ignorancia, al contrario, lo hace para medir las reacciones de los diferentes sectores del país en torno a su proyecto político populista y de gobierno.

El tabasqueño sabe que el nivel educativo de los habitantes de este país no le permitirá con facilidad la imposición de una cultura gubernamental de índole populista en el corto plazo, pero sí de algo podemos tener la seguridad es que no cejará en el intento. Hasta ahora todos sus actos y el contenido de sus mensajes viajan en ese sentido, porque el proyecto ahora no es gobernar simplemente, sino trascender como uno de los lideres populistas más afamados de la historia del hemisferio.

Pero regresando a su constante violación de los ordenamientos constitucionales, el señor Andrés Manuel López Obrador dijo que los caminos que s construyan con los recursos de las subastas de los bienes decomisados al narcotrafico y a los políticos corruptos, llevarán una placa con la leyenda “”esto se obtuvo d cartel mengano, esto se obtuvo del político corrupto diputado de tal”. Con esta determinación el Presidente de la Republica se coloca como el principal desobediente del mandato establecido en la letra de la Constitución Política de los Estados Unidos Mesicanos.

El Ejido de Balancan, que muchas veces padeció los excesos de su activismo político, fue testigo del anuncio de la siguiente violación constitucional que organizará el mandatario al señalar que los caminos que se construyan con los recursos de las subastas de los bienes decomisados al narco y a los políticos corruptos, llegaran una placa con la leyenda: “”esto se obtuvo del cartel mengano; esto se obtuvo del político corrupto fulano de tal”. Ya encarrerado también prometió que los recursos que se obtengan de la segunda subasta serán para construir un camino en cuatro poblados.

El Presidente de la República ha mostrado y demostrado hasta ahora, muy poco respeto por,el,marco constitucional de este país, y alguien tiene que poner un freno. Hasta ahora muy pocos se han atrevido a realizar una demanda sería y motivada ante la Suprema Corte de Justicia de la Nación para que de una vez por todas se establezca hasta dónde llegan las facultades y atribuciones del Presidente de la Republica. Andrés Manuel López Obrador no puede andar pululando por el país regando violaciones constitucionales, y lo peor, eternizando la obra de los grandes delincuentes de este país. Al tiempo. Vladimir.galeana@capitalmedia.mx