La mortal gripe aviar reaparece en bandadas de aves comerciales de EUA en Utah y Dakota del Sur

MINNEAPOLIS (AP) — La gripe aviar altamente patógena ha hecho su primera aparición esta temporada en bandadas de aves comerciales de Estados Unidos, afectando una granja de pavos en Dakota del Sur y otra en Utah y generando preocupaciones de que puedan surgir más brotes.

El Departamento de Agricultura de EE.UU. informó que la influenza aviar, que es mortal para las aves comerciales, fue confirmada en una bandada de 47.300 pavos en el condado de Jerauld, Dakota del Sur, el 4 de octubre y en una granja con 141.800 aves en el condado de Sanpete en Utah el viernes pasado.

Los brotes son los primeros reportados entre bandadas comerciales en Estados Unidos desde que la enfermedad afectó a dos granjas de pavos en las Dakotas en abril. Las manadas infectadas normalmente se destruyen para evitar la propagación de la gripe y luego se descontaminan las granjas.

Antes de la semana pasada, los únicos informes de gripe aviar en los últimos meses en EE.UU. fueron apariciones esporádicas en bandadas de traspatio o entre aves silvestres como patos, gansos y águilas. Si bien las aves silvestres a menudo no muestran síntomas de influenza aviar, las infecciones en ellas son una preocupación para la industria avícola porque las aves migratorias pueden transmitir la enfermedad a bandadas comerciales vulnerables.

“No dudo que tendremos más casos”, dijo este martes en una entrevista la veterinaria del estado de Dakota del Sur, Beth Thompson. “Me sorprendería gratamente si termináramos porque la migración apenas comienza”.

El año pasado, la gripe aviar costó a los productores avícolas estadounidenses casi 59 millones de aves en 47 estados, incluidas gallinas ponedoras, pavos y pollos criados para carne, lo que la convierte en el brote más mortífero de la historia del país, según cifras del USDA. El brote provocó aumentos en los precios de los huevos y el pavo para los consumidores y le costó al gobierno más de 660 millones de dólares.

El número de víctimas del brote de 2015, considerado el desastre de salud animal más costoso en la historia de Estados Unidos, con más de mil millones de dólares en costos para el gobierno, fue de casi 51 millones de aves en 15 estados.

Las infecciones por gripe aviar en humanos son relativamente raras y no se consideran un riesgo para la seguridad alimentaria. Pero a medida que afecta a otras especies, incluidos algunos mamíferos, los científicos temen que el virus pueda evolucionar y propagarse más fácilmente entre las personas. Camboya informó esta semana de su tercera muerte humana por gripe aviar este año.

Los funcionarios de agricultura consideran que los casos de este año son parte del brote del año pasado, que llegó a EE. UU. en febrero de 2022 después de extenderse por Europa. Estados Unidos ha impuesto restricciones periódicas a las importaciones de aves de corral procedentes de Europa para limitar el potencial de propagación. Thompson dijo que el virus nunca desapareció por completo, a diferencia de 2015, y que la versión que ahora circula es esencialmente la misma que se propagó el año pasado.

“Simplemente estamos alentando a los propietarios de aves a que se aseguren de aumentar sus prácticas de bioseguridad porque la gripe aviar todavía existe y es fácil de contraer”, dijo Bailee Woolstenhulme, portavoz del Departamento de Agricultura y Alimentación de Utah.

Sin embargo, los productores han mantenido estricta su bioseguridad durante varios años, y hay poco más que los agricultores puedan hacer más allá de las medidas que ya han tomado para tratar de mantener el virus fuera de sus rebaños. La estrategia principal es evitar que los excrementos de aves silvestres lleguen a los establos avícolas en el calzado y la ropa de los trabajadores, o que hagan autostop en equipos agrícolas, ratones, pájaros pequeños e incluso partículas de polvo.

Este fue el primer caso en Utah este año, dijo Woolstenhulme, pero el año pasado 16 granjas de pavos, una granja de huevos y varias parvadas de traspatio se vieron afectadas en el estado.

Los productores de Dakota del Sur perdieron casi 4 millones de aves el año pasado. Iowa, el estado más afectado, con casi 16 millones de aves perdidas, no ha registrado un caso desde marzo.

KJ