Respaldan senadores a artesanos que denuncian discriminación en Monte Albán

 

Artesanos de Oaxaca denunciaron en la Cámara de Senadores las desigualdades que han padecido en la zona arqueológica de Monte Albán, al no pueden vender sus productos a los turistas ni contar con un espacio adecuado para ello.


Artesanos de Oaxaca denunciaron en la Cámara de Senadores las desigualdades que han padecido en la zona arqueológica de Monte Albán, al no poder vender sus productos a los turistas ni contar con un espacio adecuado para ello.

La presidenta de la Comisión de Cultura, Susana Harp Iturribarría, explicó que este grupo de artesanos se ha encontrado con dificultades por parte de las autoridades y los trabajadores del INAH en Monte Albán, pero acusó que hay otro colectivo que “está cobijado” y tiene un acuerdo para que se les trate con dignidad.

“Lo que estamos pidiendo es igualdad y equidad en el trato para con este grupo de artesanas y artesanos; que se les trate con todo el respeto, que se les respeten sus derechos humanos, que no haya una discriminación, como lo ha habido hasta el día de hoy”.

Susana Harp enfatizó que ella y otros senadores ayudarán a abrir un diálogo para resolver la problemática.

El senador Adolfo Gómez Hernández coincidió en la necesidad de acompañar y auxiliar a este grupo de artesanos, puesto que desde hace varios meses, los encargados de Monte Albán han tratado de desalojarlos, pese a que tienen más de 60 años resguardando el espacio donde ofrecen sus productos a los turistas.

La senadora Guadalupe Covarrubias Cervantes detalló que estos artesanos ya cuentan con un proyecto para ubicarse en un lugar digno dónde exponer y comerciar sus trabajos, que no se interpone con el espacio donde el mismo INAH promueve sus productos.

“Ellos también tienen derecho a un lugar adecuado para que vendan sus artesanías”, reiteró.
Las artesanas y artesanos pidieron respeto y que no haya más discriminación por parte de los trabajadores del Instituto Nacional de Antropología e Historia (INAH), encargados de esa zona arqueológica.

Además de que se les reconozcan los más de 60 años que han laborado en ese sitio histórico y se les proporcionen áreas dignas para que puedan comerciar sus artesanías.

La artesana Francisca Cruz pidió la intervención del Ejecutivo Federal en el asunto, ya que, particularmente a las mujeres, se les humilla y no se les permite trabajar cuando algún turista les pide que elaboren una pieza al momento.

“Nos maltratan psicológicamente ‘que porque no servimos para trabajar’, ‘que porque debemos estar en casa’, cuando nosotros estamos laborando y vendiendo las artesanías que trabajamos a mano”, acusó la artesana oaxaqueña.

AGM