Preocupa a gobierno brasileño repunte de violencia carcelaria

 

Expertos y miembros del propio gobierno critican las condiciones deplorables de las prisiones nacionales


El presidente brasileño, Michel Temer, expresó su preocupación por la “pavorosa matanza” cometida por grupos criminales organizados en varias cárceles del país, lo que provocó la muerte de más de 100 personas desde inicios de año.

“Los grupos criminales tienen preceptos propios, hasta cuando realizaron aquella pavorosa matanza lo hicieron basándose en códigos propios”, manifestó ayer Temer en referencia a las organizaciones criminales que han sembrado el terror en los presidios de los estados de Amazonas y Roraima —norte del país— en los últimos días.

Los incidentes dejaron un saldo de 56 presos muertos, el pasado 1 de enero en el Complejo Penitenciario Anísio Jobim, en Manaus, y otros 33 en la Cárcel Agrícola Monte Cristo, en la ciudad de Boa Vista, como consecuencia de la lucha entre facciones criminales por controlar el tráfico de drogas.

Las autoridades atribuyen a miembros de la Familia del Norte (FDN) –una de las dos decenas de facciones– el brote de violencia en las cárceles desde el inicio del año.

Expertos y miembros del propio gobierno critican las condiciones deplorables de las prisiones nacionales, que se encuentran saturadas de reos.