Advierte Alberto Peláez que el crimen organizado va ganando una guerra silenciosa

La senadora Olga Sánchez Cordero, promotora entre otros de la entrega de este reconocimiento, dijo estar convencida de que el homenajeado representa sin duda el ideal de neutralidad, empatía y libertad del periodismo. 

"Es tarea de todos nosotros el hacer un estado, un país más justo, más libre, más solidario, más equitativo".


Ejercer el periodismo en algunas partes de la República Mexicana, como en el norte del país, es vivir una guerra silenciosa, donde siguen ganando la batalla el hampa y el crimen organizado sin que el gobierno atienda el problema, alertó el periodista Alberto Peláez al recibir un reconocimiento por su trayectoria en el Senado de la República.

Desde la tribuna, el corresponsal de guerra de 59 años de origen español y nacionalizado mexicano agradeció poder ejercer la libertad como ciudadano, “pero ese esfuerzo y ese compromiso tiene que ser real”, además de que el Estado de derecho que promueven los legisladores debe ser fuerte y sólido, “¿pero o no les dejan o qué”?

Tras destacar que “la sociedad civil sufre los golpes del hampa y también nosotros los periodistas”, Alberto Peláez lamentó que el año pasado hayan muerto 17 compañeros a manos del crimen organizado, “y aquí, señorías, hay una parte de corresponsabilidad, porque ejercer el periodismo en algunas partes de la República es vivir una guerra”.

Fue entonces que manifestó su preocupación por la falta de ayuda que, en muchas ocasiones, “no recibimos de parte de las diferentes administraciones locales, estatales y federales”.

Ante ello, se cuestionó: ¿“Qué está pasando señorías? ¿Qué está pasando con el Estado de derecho cuando son ustedes senadores los que están haciendo que ese Estado de derecho sea fuerte y sólido, pero o no les dejan o qué”?
Expuso que a los ciudadanos “nos es irrelevante si anteriores administraciones no supieron administrar correctamente. No es un problema de culpar a los anteriores, entre otros motivos, porque a estas alturas ya da igual”.

Lo que se hizo mal o lo que se hizo bien ya está hecho, “pero lo cierto es que se tienen que corregir los errores y se tienen que corregir de verdad y no se puede decir con la boca pequeña, señorías. No se puede nadar y guardar la ropa porque no sería leal con la sociedad”.

En ese sentido, el periodista manifestó que “los ciudadanos pedimos respuestas que nos lleven al sendero de la libertad, de la equidad, de la igualdad”.

Alberto Peláez anunció que, después de ser el único periodista que ha cubierto 20 guerras, en breve se desplazará a Ucrania y recordó que todos esos conflictos bélicos a los que ha presenciado han sido terribles, como cuando atestiguó que un francotirador mató de dos tiros en la cabeza una joven en la ciudad de Osijek, Croacia.

También, como en la ciudad de Benissa, Bosnia, mataron a más de 8 mil civiles en menos de dos días o los niños de la sitiada Vukovar que salieron de sus refugios después de tres meses de incesantes bombardeos y muchos de ellos lo hicieron con el pelo canoso por los nervios, el estrés y la incertidumbre.

Agradeció el reconocimiento, “pero no puedo marcharme de este estrado sin recordar que es tarea de todos nosotros el hacer un estado, un país más justo, más libre, más solidario, más equitativo y nosotros los periodistas coadyuvamos y lo seguiremos haciendo para que todo este “cóctel” de palabras tenga sentido. Pero es muy importante que “ustedes también sean testigos y lo tomen sin titubeos”.

La senadora Olga Sánchez Cordero, promotora entre otros de la entrega de este reconocimiento, dijo estar convencida de que el homenajeado representa sin duda el ideal de neutralidad, empatía y libertad del periodismo.

El ideal de hacer periodismo con un rostro humano como lo ha hecho él siempre en el que, sin perder el rigor periodístico, en la templanza logró conjugar el trabajo de informar con la labor humanitaria de hacer visibles a las víctimas de las guerras.

AGM