Analizan declarar en quiebra Astillero comprado por Lozoya

Emilio Lozoya
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En la administración de Emilio Lozoya, ahora prófugo de la justicia, Pemex compró la mayor parte de las acciones del astillero “Hijos de J. Barreras S.A.” —que representa pérdidas equivalentes a 50 millones de euros— por lo que ya se analiza si entra en concurso mercantil (quiebra). Octavio Romero Oropeza, director general de Pemex, señaló […]


En la administración de Emilio Lozoya, ahora prófugo de la justicia, Pemex compró la mayor parte de las acciones del astillero “Hijos de J. Barreras S.A.” —que representa pérdidas equivalentes a 50 millones de euros— por lo que ya se analiza si entra en concurso mercantil (quiebra).

Octavio Romero Oropeza, director general de Pemex, señaló que septiembre de 2019 se presentó ante la Fiscalía General de la República (FGR) denuncias de hechos por la posible comisión del delito de Administración Fraudulenta del astillero español.

Detalló que en la administración de Emilio Lozaya, Pemex compró 51 por ciento de las acciones en un escenario en donde estaba por iniciar proceso de quiebra y en donde la paraestatal mexicana nunca participó en la administración.

En la conferencia de prensa matutina, dijo que la Auditoría Superior de la Federación (ASF) reportó el año pasado que Pemex no ha obtenido ninguna ganancia de su inversión en el Astillero por lo que se analiza si entra en un concurso mercantil, es decir quiebra, si no se concreta la venta de las acciones de Pemex.

Romero Oropeza detalló que en 2013, Pemex Comercio Internacional (PMI) compró parte de astillero español “Hijos de J. Barreras S.A.” y luego se contrató para la construcción de una Unidad Habitacional Flotante (flotel) para dar servicio al personal de Pemex que trabaja en las instalaciones ubicadas fuera de la costa, pero nunca fue utilizado a su máxima capacidad; costó 145 millones de euros y no se ha podido vender porque el avalúo arroja cantidades menores.

Aunado a ellos, de febrero de 2017 a 2018, el astillero celebró cuatro contratos de construcción de buques, uno de los era para un crucero de lujo Ritz Carlton, en donde se otorgó una garantía por 16 millones de euros, el 50 por ciento a cargo de Pemex.

Otra de las irregularidades, es que en 2016 el Astillero no construyó ninguna otra embarcación registrándose pérdidas de 5.5 millones de euro

El titular de Pemex aseveró que los accionistas del astillero pretendían comprar las acciones de Pemex, un 51 por ciento a un euro.

Señaló que Pemex busca negociar alternativas con potenciales compradores, para recuperar la inversión realizada en el Astillero, de 5.1 millones de euros, así como su garantía, de 8 millones de euros.