El atroz y repugnante feminicidio representa la máxima degradación de una sociedad, advierte Geovanna Bañuelos

Geovanna Bañuelos Foto: Internet
Geovanna Bañuelos Foto: Internet 

“Como mujer, me es imposible pensar en algún acto más atroz y repugnante que el feminicidio”, manifestó la senadora Geovanna Bañuelos de la Torre al alertar que este delito, en conjunto con la violencia contra las mujeres, “representa la máxima degradación de una sociedad que continúa anclada en una cultura machista”. Recordó que 2019 fue […]


“Como mujer, me es imposible pensar en algún acto más atroz y repugnante que el feminicidio”, manifestó la senadora Geovanna Bañuelos de la Torre al alertar que este delito, en conjunto con la violencia contra las mujeres, “representa la máxima degradación de una sociedad que continúa anclada en una cultura machista”.

Recordó que 2019 fue un año de luto para las mexicanas. En promedio, 11 mujeres fueron asesinadas diariamente y, en lo que va de este año, se han cometido en promedio tres feminicidios cada día.

Ante ello, la coordinadora del Partido del Trabajo en el Senado de la República aseguró que necesario replantear las políticas públicas, económicas, culturales y preventivas para erradicar el feminicidio, además de modificar el marco legislativo para garantizar que el Estado proteja a las mexicanas.

En el marco de la instalación de la Comisión Especial Encargada de dar Seguimiento a los Casos de Feminicidio de Niñas y Adolescentes, la legisladora, señaló que el feminicidio es el delito cometido contra el sector más vulnerable de la población que le arrebata la vida y los sueños a cientos de mujeres, niñas y adolescentes.

Dio a conocer que el incremento de este ilícito registrado entre 2015 y 2019 fue de 129%, de acuerdo con datos del Secretariado Ejecutivo del Sistema Nacional de Seguridad Pública, período en el que se han reportado 356 feminicidios de niñas y adolescentes.

“Estos datos son sumamente preocupantes, se infiere que debemos replantear las políticas públicas, económicas, culturales y preventivas, además, de modificar el marco legislativo para garantizar que el Estado proteja a las mexicanas”, aseveró.

Por ello, hizo un llamado para estar atentos a conductas más sutiles como los micromachismos, la anulación, el lenguaje y humor sexistas, la desvalorización y la violencia física, psicológica y económica, para visibilizar las formas sutiles y explícitas de esta grave problemática.

“Me resulta inimaginable y me indigna profundamente que un ser humano -un miembro de nuestra especie- le arrebate la vida por placer, o por hacer una demostración de poder”, indicó.

La legisladora por Zacatecas hizo referencia a datos de la Organización de Naciones Unidas sobre los factores de riesgo en la infancia para violencia y feminicidio como la falta de un documento de identidad, el analfabetismo y el abandono escolar, el trabajo infantil, el matrimonio infantil, el embarazo precoz, el simple hecho de nacer una mujer indígena, los altos niveles de pobreza en los que viven millones de niñas y adolescentes, así como la desintegración familiar.

Por lo que propuso acciones orientadas a prevenir, atender, sancionar y, finalmente, erradicar la violencia y el feminicidio con la participación de todos, del gobierno, instituciones públicas y la sociedad en general para implementar acciones de prevención y capacitación; promover marcos normativos y de política pública que sean integrales y con perspectiva de género y de interculturalidad, así como con enfoque de derechos humanos.

De igual manera fortalecer a las instituciones estatales y municipales, así como sus mecanismos de coordinación; proveer servicios accesibles de calidad para la atención de víctimas, que incluyan servicios de salud, de procuración e impartición de justicia, además de garantizar un presupuesto que sea suficiente para atender y erradicar este fenómeno desde las instituciones que velan por la seguridad de las mujeres.