Ex integrante de la GN afirma que Fuerzas Armadas no están capacitadas para las tareas de Seguridad Pública: Causa en Común

CIUDAD DE MÉXICO, 28 de Septiembre de 2022.- Adriana Herrera, quien prestó sus servicios por 23 años en las filas de las Fuerzas Armadas, donde llegó a ser Mayor; además en el último año y medio fue asignada a la Guardia Nacional, hoy afirmó que:

“Las Fuerzas Armadas no están capacitadas para desempeñar funciones de seguridad pública, porque sencillamente no están preparadas para eso”.

La también Licenciada en Derecho, aseguró que la disciplina, la subordinación son principios básicos para la subsistencia de las Fuerzas Armadas, para un Ejército, pero no para hacer misiones que no les corresponden.

“La obediencia jerárquica, la subordinación y la disciplina en el área de seguridad pública, lejos de ayudar perjudican, te restan autonomía ética, te eliminan totalmente tu capacidad de reflexionar, sobre las consecuencias que trae cumplir órdenes contrarias a Derecho”.

Adriana Herrera, aseguró que fue testigo que en los Centros de Reclutamiento de la Guardia Nacional, y al momento de darlos de alta los integraron como soldados, policías Militares asignados a la Guardia Nacional

“Esa fue una primera irregularidad de la que fui testigo, entonces lejos de fortalecer o consolidar una Guardia Nacional Civil, lo que hicieron fue acrecentar sus filas en las Fuerzas Armadas”.

“Eso es una equiparación a una incorporación forzosa a las Fuerzas Armadas en tiempos de Paz y es una violación gravísima a los Derechos Humanos”.

Adriana, dijo que todos los militares que fueron asignados a la Guardia Nacional como pie Veterano, lo hicieron siempre dependiendo administrativamente de su dependencia de origen.

Adriana, afirmó que el Ejército cuando genera victimas por disparos o por enfrentamientos o uso excesivo de la fuerza, da seguimiento a través de la Unidad de Atención a Víctimas.

“Las acosa con la finalidad de que puedan firmar convenios de asistencia inmediata y calcula reparaciones de daños con facultades que no tienen para ello, entonces es una mala práctica que la Guardia Nacional adoptó”.

“Al momento en que yo como abogada, encargada de la Dirección de atención a Víctimas de la Guardia Nacional, me vi involucrada en este tipo de procedimientos, cuando las copio la Guardia Nacional de la SEDENA yo ya no quise participar en ese tipo de actividades que son totalmente irregulares y carecen de un marco jurídico”

Finalmente Adriana, dijo que al negarse a realizar esas actividades, fue sancionada por su mando superior.

“Me regresaron a las Fuerzas Armadas permanentes y me dieron como destino la plaza de Reynosa Tamaulipas, eso lo entiendo como una represalia, lo entiendo como un mecanismo de intimidación a lo que están acostumbrados en las fuerzas armadas”

Estas declaraciones las realizó Adriana, en el marco de la Presentación de la investigación titulada “Policías al Grito de Guerra: ser Policía en una Corporación militar”, presentado por la organización civil “Causa en Común” el Observatorio de la Guardia Nacional y la Militarización en México y la Comisión Mexicana de Defensa y Promoción de los Derechos Humanos (CMDPDH), esto a las afueras de la Suprema Corte de Justicia de la Nación (SCJN).

El informe se basa en los testimonios de 31 ex integrantes de la Guardia Nacional (10 mujeres y 21 hombres), donde se describe el abandono y los agravios a derechos humanos que han vivido las y los ex Policías Federales, al interior de la corporación hasta el día de hoy.

En el informe las personas entrevistadas narran cómo ha sido trabajar en un contexto de discriminación y criminalización constante por parte de mandos militares y del propio presidente de la República.

Según “Causa en Común”, para la investigación se analizaron tres ejes que comprenden la situación que atraviesa la Guardia Nacional y el trato a ex policías.

• Condiciones laborales.
• Pérdida de capacidades e información.
• Consecuencias para la seguridad y el bienestar del país.

Durante la conferencia, María Elena Morera Mitre señaló que, después de esta investigación, la conclusión es:

“Que nos mintieron al decir que la Guardia Nacional iba a ser civil cuando siempre ha sido militar”.

La activista, aclaró no estar en contra de las Fuerzas Armadas, que tantas cosas buenas hacen por el país.

“Estamos en contra de los mandos militares quienes se brincan la Constitución y ponen en riesgo la vida de los elementos que mandan al territorio”.

Marcela Villalobos activista e integrante de “Seguridad Sin Guerra”; destacó que la Corte debe acelerar las resoluciones de inconstitucionalidad, de lo contrario, su silencio es cómplice de una Guardia Nacional militar.

“Lo que ustedes van a encontrar en el informe, son testimonios que declaran violaciones a los derechos humanos, falta de certeza laboral, condiciones de acoso y hostigamiento, todo esto, da cuenta de consecuencias catastróficas al interior y exterior de la corporación, por ello es importante señalar que la impunidad militar mata”.

Lucía Chávez directora de la Comisión Mexicana de Defensa y Promoción de los Derechos Humanos (CMDPDH) aseguro que la militarización de la seguridad pública rompe con el paradigma de seguridad ciudadana, y afirmó que:

“La lógica militar es de combate frontal al enemigo y de guerra, además que es contraria a los estándares internacionales en materia de derecho humanos y al propio texto constitucional”.

Finalmente, las organizaciones y activistas hicieron un llamado a las y los Ministros de la Suprema Corte, para que analicen en el Pleno; las acciones de inconstitucionalidad y los amparos promovidos contra la militarización del país y convocaron a partidos políticos, asociaciones civiles, personas académicas e intelectuales, ciudadanas y ciudadanos en general, a manifestar su oposición a esta deriva militarista, incompatible con cualquier democracia, y que inevitablemente conduce, junto con otras manifestaciones autoritarias, hacia un régimen político sustentado en la restricción de libertades y derechos.