“Ni una muerta más”, exigen diputadas de todos los partidos

 

Ecatepec fue el punto de partida para discutir el tema de los feminicidios


El asesinato de mujeres por razones de género o feminicidio unió a las diputadas de todas las fracciones parlamentarias para levantar un airado “Ni una muerta más”.

Las legisladoras, que acusaron qué en Ecatepec, municipio mexiquense que hasta hace unos días gobernaba el Partido Revolucionario Institucional (PRI), se convirtió en el punto de partida para exigir que las autoridades de los tres niveles de gobierno tomen cartas en el asunto.

Varias veces subieron las legisladoras a la tribuna para arropar a sus compañeras que lanzaban duras críticas contra autoridades y gobiernos de todos los colores que voltean la mirada ante las cifras frías, pero que detrás llevan tragedias en hogares, familias.

En América Latina cada día se cometen 11 feminicidios, pero nueve de ellos son contra mujeres mexicanas y el 60 por ciento de ellos quedará impune, advierte la diputada María Elizabeth Díaz. La morenista citó cifras del Observatorio Nacional Contra el Feminicidio.

Las condenas contra los 15 estados donde se instauró la alerta de género por el número de asesinatos de mujeres se generalizaron. La omisión y en algunos casos colusión de las autoridades es vergonzante, acusan molestas las legisladoras.

Carolina Aguilar del Partido Encuentro Social acusa que en el Estado de México la alerta se emitió en 2015 para 11 municipios, a tres años, esos municipios siguen siendo los más peligrosos para las mujeres y de forma marcada Ecatepec.

Nada menos, la semana pasada fue detenido un sujeto que confesó haber asesinado a, por lo menos, 10 mujeres tan sólo en la zona de Jardines de Morelos, una zona urbana y de alta concentración humana.

Pero el apoyo no fue absoluto, las mujeres del PRI permanecieron en su lugar, cuando las críticas y reclamos apuntaban al Estado de México. Incluso trataron de defender la labor que han desarrollado los gobiernos emanados de su partido.

La penosa defensa corrió a cargo de Ana Lilia Herrera quien trató de desviar la atención a la Ciudad de México, Coahuila, Durango, Jalisco, Puebla y Campeche, donde los crímenes de género también han crecido de forma exponencial. Acusó a esas entidades de lucrar con “la incertidumbre que viven las mujeres cuando salen a las calles, eso no tiene nombre”, remató.

Su participación sólo motivo los reclamos de sus contraparte, incluso la diputada de Movimiento de Regeneración Nacional (Morena), al calor de la discusión pidió que se cite a comparecer al gobernador del Estado de México, Alfredo del Mazo. Se olvida o desconoce que la Cámara de Diputados no puede hacerlo, es un gobernador de un estado soberano de la República.

Gerardo Fernández Noroña, en un discurso que lo reivindica de las groserías que ha proferido contra sus compañeros diputados, se pronunció por una condena generalizada, erradicar la violencia en general y en particular contra las mujeres; la verbal, en el trato y en los abusos. Trabajo, que dijo, no sólo corresponde a las mujeres, sino principalmente a los varones.

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