“No debemos confundir la colaboración y el diálogo entre Poderes del Estado, con la subordinación frente a los otros Poderes”: Ministra Norma Lucia Piña

La Ministra Presidenta del Poder Judicial de la Federación, Norma Lucía Piña Hernández, afirmó que la Independencia Judicial es la principal Garantía de imparcialidad del Poder Judicial siempre en beneficio de la sociedad en beneficio del país.

“Como sociedad debemos tener muy claro que, en una recta interpretación de nuestra Constitución, no debemos confundir nunca la colaboración y el diálogo entre los Poderes del Estado, con la subordinación del Poder Judicial Federal frente a los otros Poderes”

Esto en referencia a las revelaciones, que hiciera en días pasados el Presidente López Obrador, sobre las supuestas injerencias del entonces Ministro Presidente de la Suprema Corte Arturo Zaldívar Lelo de Larrea.

Al participar en el Panel “El Derecho en el México que Viene”, en el marco del Congreso Nacional de Abogados de la Barra Mexicana del Colegio de Abogados, Piña Hernández, expreso sus reflexiones personales en torno al tema de la Independencia Judicial, su vínculo estrecho con la eficacia de la justicia y en la calidad de las decisiones que impactan la vida de todas las personas.

“Es indispensable que, como profesionales del Derecho, promovamos la convicción de que la independencia judicial es una garantía para el acceso a la justicia”.

“Nuestro objetivo debe ser lograr que este concepto sea entendido a cabalidad en función de sus efectos prácticos y reales en la vida de todas las personas, de otra manera, difícilmente surgirán incentivos para su preservación, para su defensa”.

La titular del Poder Judicial de la Federación, afirmó que la independencia judicial es, por supuesto, un principio constitucionalmente reconocido, tanto en el artículo 17 como en el artículo 100 constitucionales, que la prevén como uno de los principios de la carrera judicial, pero, además y, fundamentalmente, la independencia judicial es un pilar esencial de la democracia y de la protección de los derechos.

“La independencia judicial, y tiene que quedar muy claro, no es un privilegio de los jueces, es un derecho de los justiciables, es el principio que garantiza una adecuada impartición de justicia para hacer efectivas las libertades y la igualdad de las y los mexicanos”.

“La independencia judicial no es fortuita ni gratuita, su inclusión en la Constitución requiere, necesariamente, acompañarse de mecanismos que la hagan posible y sostenible en el tiempo”.

La primera mujer en encabezar el Poder Judicial Federal, insistió en que la independencia de la Judicatura requiere de mecanismos robustos y previstos en el marco normativo e institucional, entre las condiciones claves para asegurar la independencia judicial destaca la existencia de una carrera judicial meritocrática y transparente.

“Las garantías de estabilidad y permanencia en el cargo son cruciales para posibilitar a las personas juzgadoras la toma de decisiones apegadas a derecho, sin temor a represalias o a remociones arbitrarias, y libres de cualquier forma de intimidación o coacción”.

La Ministra fue enfática al señalar que la independencia judicial y los mecanismos que la hacen posible, deben desarrollarse a la par de esquemas de rendición de cuentas y de transparencia.

“Independencia y autonomía deben ser sinónimos de responsabilidad, por ello enfatizo: la independencia judicial no es arbitrariedad, no implica licencia alguna para actuar fuera de los estándares constitucionales y legales, la independencia judicial es un derecho que garantiza el acceso a una justicia para todas las personas sin atender a influencias externas o ajenas al derecho”.

Ante miembros de la Barra del Colegio de Abogados, la Juzgadora, dijo que la defensa de la independencia judicial es, en primera instancia, una responsabilidad de las personas que integran el Poder Judicial.

“Así lo asumimos, no obstante, si bien la defensa de la independencia de la Judicatura debe empezar en los poderes judiciales, no debe acabar ahí, sin una Judicatura independiente que responda exclusivamente a la Constitución y a la ciudadanía no hay garantías para el Estado de Derecho y el acceso a la justicia, así se debe entender”.

Así mismo, advirtió que si se acepta o se justifica como sociedad que esa independencia judicial se trastoque o se destruya, ello impactará, sin lugar a dudas, tarde o temprano en una impartición de justicia que atienda a influyentismos, a razones ajenas al derecho que acabará perjudicando, necesariamente, a las personas más vulnerables.

“Se trata, entonces, de un desafío que compartimos como profesionales del Derecho, pero más que nada, como mexicanas y como mexicanos”.

La Ministra señaló que espacios como dicho panel, organizado por la Barra Mexicana del Colegio de Abogados, es muy importante porque permite reflexionar, conjuntamente, sobre los retos de la práctica jurídica y pensar, en colectivo, sobre cómo promover los valores y principios constitucionales con el propósito de construir una relación más cercana y positiva entre el sistema legal y las personas.

“El desafío que quiero plantearles este día es que trabajemos en conjunto para introducir los matices necesarios a una conversación que ha sido dicotómica y polarizadora”.

“Los abogados y las abogadas mexicanas requerimos construir una comunicación más eficaz y empática con las personas que logre sensibilizarlas sobre la relevancia de conceptos que, muchas veces, les son extraños o ajenos para su vida cotidiana, como lo es la independencia judicial”.

Finalmente señaló que el gran reto, que asume con absoluta responsabilidad el Poder Judicial Federal, es propiciar diálogos productivos, reflexivos y autocríticos para consolidar la defensa de los principios y valores democráticos enraizados en la Constitución.

“El desafío es pensar en propuestas de mejora necesarias, por supuesto, pero basadas en evidencia, en la experiencia de los usuarios y, fundamentalmente, apegadas a los derechos a los principios y a los valores constitucionales”.

CRÉDITO: Guillermo Espinosa / @Guiesga

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