La vicecoordinadora del PRD en la Cámara de Diputados, Guadalupe Almaguer, solicitó al Ejecutivo Federal declarar emergencia nacional ante la violencia contra las mujeres, y al Poder Judicial para que siga los protocolos para prevenir y atender los feminicidios con perspectiva de género y de Derechos Humanos.
Manifestó que es imposible diseñar una estrategia exitosa que combata la violencia contra las mujeres si no se cuenta con información concreta y si las autoridades no ejercen con perspectiva de género, pues en la mayoría de los asesinatos no se tiene información que permita hacer un análisis a profundidad y detectar patrones.
“No sabemos nada sobre cómo son asesinadas las mujeres con discapacidades, muy poco sobre asesinatos a mujeres trans, menos aún sobre mujeres indígenas o mujeres afromexicanas. No sabemos mucho sobre los perpetradores tampoco. No sabemos si la mujer asesinada acudió en el pasado a un hospital por golpes o violencia física o si buscó ayuda en un refugio o institución. Esa información podría ayudar a prevenir más muertes”, apuntó la Parlamentaria.
Manifestó que el Presidente Andrés Manuel López Obrador tiene la absoluta responsabilidad de mandar un mensaje a todas las instancias del gobierno para tomar medidas que realmente funcionen y que, en lugar de hacer recortes presupuestales, debe de evaluar qué políticas están funcionado y cuáles no, y rectificarlas en caso de que sea necesario.
“La violencia a las mujeres no está sólo en el asesinato, sino en las fiscalías que no responden a tiempo o en absoluto a las denuncias de desaparición, en los policías que no intervienen a los llamados de ayuda, en la comunidad que no se involucra en problemas de pareja y, en buena medida, en la carencia de datos unificados y minuciosamente catalogados a nivel nacional”.
De igual manera, la legisladora feminista subrayó la importancia de que el personal de salud garantice la protección de las víctimas y cuenten con la habilidad y formación para afrontar el problema, pues la violencia es un fenómeno predecible y, por lo tanto, prevenible.
“Las reducciones presupuestarias sí afectan directamente a la atención de las mujeres víctimas de violencia, por lo que es importante establecer políticas públicas que realmente funcionen y solucionen este problema”, concluyó.