Alerta Olga Sánchez Cordero que la trata es la versión moderna de la esclavitud

Alerta Olga Sánchez Cordero que la trata es la versión moderna de la esclavitud
 

La legisladora Olga Sánchez Cordero propone una iniciativa que busca modificar la Ley General para Prevenir, Sancionar y Erradicar los Delitos en Materia de Trata de Personas.


La trata de personas ya sea para la explotación sexual o laboral, “es la versión moderna de la esclavitud”, denunció la presidenta de la Mesa Directiva del Senado de la República, Olga Sánchez Cordero, quien refirió que México ha hecho muchos esfuerzos para erradicar esta situación, pero desafortunadamente es muy difícil de encuadrar para procesar a los victimarios, por lo que la Ministra en retiro busca mejorar leyes para hacer viable la judicialización de casos.


Recordó que desde 2016 la Organización Internacional del Trabajo estimaba que las víctimas de trata con fines de explotación sexual rondaban los 4.8 millones de personas, eso sin contar los 15.4 millones de matrimonios forzosos considerados como una variante de trata en los que por dinero o coerción, se realizan enlaces que al no ser formalmente matrimonios son difíciles de tipificar.


“Hoy, en la trata con fines de explotación sexual dos tercios de las víctimas son mujeres y, por lo menos, una de cada cinco víctimas son niñas, niños o adolescentes”, detalló subrayó la senadora por Morena.


Agregó que a todo ello se suma el deterioro físico, emocional, psicológico y personal que experimenta la víctima de explotación sexual; comúnmente, dijo, también viven en el confinamiento involuntario, golpes, amenazas y violación.


Por eso, desde el 2007 México ha desarrollado una legislación para inhibir este delito, pero desafortunadamente ese esfuerzo aún es insuficiente para la aplicación de la norma vigente, pues prevalece la falta de capacidades técnicas en el personal, se registra sobrecarga laboral o falta de presupuesto en el ámbito ministerial y no existe una coordinación institucional estandarizada con autoridades del sector turístico, policial o de transporte.


En su iniciativa, Sánchez Cordero denuncia la falta de presupuesto suficiente para llevar a cabo las medidas preparatorias y el principio de no revictimización y, consecuentemente, no hay un acompañamiento efectivo y real a la víctima.

Alerta Olga Sánchez Cordero que la trata es la versión moderna de la esclavitud


En este contexto, al que califica de lamentable, la legisladora propone una iniciativa que busca modificar la Ley General para Prevenir, Sancionar y Erradicar los Delitos en Materia de Trata de Personas.

De igual forma, pretende garantizar un acompañamiento especializado efectivo a las víctimas, resguardar la identidad de la víctima, proporcionar apoyo físico, psicológico y jurídico, así como la obligación a la autoridad de recibir las denuncias por cualquier medio ya sea físico o electrónico.


La también ex secretaria de Gobernación propone actualizar las referencias al Código Nacional de Procedimientos Penales; endurecer penas y definir como abuso de poder o daño grave las afectaciones a la familia de la víctima o a la persona a la que le tenga afecto


Considera fortalecer estándares de seguridad, transparencia y disponibilidad de los procesos, reducirá tiempos, contribuirá al acceso a la justicia, y abonar al respeto del derecho a un medio ambiente sano.


La iniciativa contempla también con autoridades ministeriales endurecer algunas penas, homologar algunos marcos normativos y disponer de la búsqueda de la suficiencia presupuestal a través de un transitorio.

“No cerremos los ojos ante el tema de trata de personas. Las víctimas exigen que actuemos de manera unida, sin titubeos y colores partidistas, ni mezquindades, pues nuestro apoyo se requiere decidida y urgentemente”.


Por eso, a través de un video que publicó en sus redes sociales, la presidenta del Senado invitó a todos los grupos parlamentarios a respaldar esta iniciativa que ha integrado a partir de la experiencia y conocimiento de las realidades que viven, sobre todo, las y los juzgadores, porque ellos son los que aplican las leyes y, en muchas ocasiones, tienen dificultades para encuadrar este tipo de conducta con el tipo penal.