Minimiza a poderosos. El presidente Enrique Peña advirtió que ningún Estado es capaz de imponer su voluntad

 

Ningún país debe imponer su voluntad: EPN


El presidente Enrique Peña Nieto advirtió que ningún Estado, por poderoso que sea, puede pretender imponer su voluntad contra los principios forjados y vigentes por la comunidad internacional, por lo que exigió que las relaciones internacionales se basen en el derecho, el respeto y no en el uso de la fuerza.

Peña encabezó la sesión de la Conferencia General del Organismo para la Proscripción de las Armas Nucleares en América Latina y el Caribe, es decir, la conmemoración del 50 aniversario del Tratado de Tlatelolco en la sede de la Secretaría de Relaciones Exteriores (SRE).

Frente a la actual coyuntura internacional, Peña Nieto dijo que el Tratado de Tlatelolco es prueba patente de la eficacia y vigencia de los acuerdos multilaterales.

Manifestó que, durante más de siete décadas, los pueblos de las Naciones Unidas han estado resueltos a llevar a la práctica los más altos valores universales como la paz y la seguridad internacional, los derechos humanos y el progreso social.

“En este acto, los países de América Latina y el Caribe nos reafirmamos como una región propositiva y comprometida con la paz mundial.

Compartimos la visión de que las relaciones internacionales deben basarse en el derecho, el respeto y el diálogo, jamás en la intimidación y el uso de la fuerza”, puntualizó.

Si bien no manifestó de manera explícita los recientes conflictos con el nuevo gobierno de Estados Unidos, Peña Nieto expresó su agradecimiento al respaldo que las naciones de esta zona han manifestado a México.

“Frente a la coyuntura internacional, el mundo observa nuestra unidad latinoamericana, por eso agradezco a los pueblos de América Latina y el Caribe su apoyo, solidaridad y afecto. Gracias en nombre de todos los mexicanos. Los amigos destacan en los momentos de dificultad, y para los mexicanos ha sido muy emotivo recibir su respaldo”.

Reiteró el compromiso del Estado mexicano con el desarme mundial, por lo que se pronunció para que, con urgencia y de manera inaplazable, se avance a una norma universal de proscripción de las armas nucleares y, sobre todo, a detener el tráfico ilegal de armas.

“A nivel mundial, 44 por ciento de las muertes violentas son provocadas por armas de fuego. Cada año mueren alrededor de 740 mil personas a causa de armas pequeñas y ligeras. Nuestra región es una de las más afectadas por este flagelo.

Aunque hemos construido un andamiaje multilateral para evitar el tráfico de armas y municiones, debemos redoblar esfuerzos para hacer efectivo el tratado de comercio de armas”, precisó.