No todas las iniciativas de AMLO son negativas, pero las malas no pasarán: Damián Zepeda

De las 20 iniciativas que envió el Presidente de la República a la Cámara de Diputados -18 constitucionales y dos legales o secundarias-, “aprobemos y fortalezcamos lo positivo, defendamos a México de lo malo y propongamos una visión distinta de cómo sí solucionar los problemas del país”, manifestó el senador Damián Zepeda Vidales.

En tanto, el senador Ricardo confía en que se alcanzarán votos suficientes para aprobar iniciativas del Ejecutivo federal porque son de “gran calado”; ya se han aprobado alrededor de 60 reformas que parecían imposibles en el sexenio, recordó.

Recordó que, de acuerdo con sus facultades, el presidente Andrés Manuel López Obrador envió las 20 iniciativas, 18 constitucionales y dos legales a la Cámara de Diputados, por lo que el Senado actuará como cámara revisora en caso de que se aprueben los proyectos en la colegisladora.

En una serie de mensajes que compartió en redes sociales, Monreal afirmó que no se trata de propuestas “para la próxima elección, sino para la próxima generación de mexicanas y mexicanos”, ya que modifican al Poder Judicial y a los órganos electorales; robustecen el bienestar y afianzan la política social; y refuerzan la austeridad como política de Estado.

Los proyectos, agregó, buscan eliminar a entes surgidos en el neoliberalismo; mejorar la condición del campo y sus habitantes; otorgar fuerza legal a las comunidades indígenas y afromexicanas; y asegurar la justicia social en materia de educación, salud y bienestar.

En tanto, el Grupo Parlamentario de Morena en la Cámara alta respaldó, en un documento, el paquete de Reformas Constitucionales enviado por López Obrador, por considerarlas un compromiso inquebrantable con la justicia social y la integridad de nuestra Constitución.

Luego de signar el documento, el senador tabasqueño Ovidio Peralta expresó su orgullo y aseguró que dichas reformas serán analizadas, discutidas y defendidas de manera patriótica en tribuna, toda vez que buscan recuperar el espíritu nacional, social y público de nuestra Carta Magna.

Por su parte, Damián Zepeda, tras analizar las propuestas del Presidente Andrés Manuel López Obrador, el legislador panista compartió en su cuenta de X varias reflexiones de lo malo y lo bueno para el país.

Opinó que “no debemos de minimizar las iniciativas, pues el Presidente plantea una visión de país integral”, reconoció el legislador al explicar que el jefe del Ejecutivo federal complementa lo que ya ha impulsado a lo largo de su gobierno.

“Son temas de relevancia como seguridad, justicia, democracia, salud, educación y de economía; entonces, marca postura en cada uno de los distintos temas y creo que tenemos que cuidar eso, entender que así lo plantea su visión de país”.

Sin embargo, Damián Zepeda recomendó que la oposición en el Congreso de la Unión “debemos analizar a fondo esos temas y, aquello que sea positivo lo tenemos que apoyar y aquello que sea negativo lo tenemos que rechazar y plantear una alternativa”.

Planteó que los opositores no deben caer en posturas radicales en el sentido de que todo lo que venga de López Obrador hay que rechazarlo, en sus iniciativas hay algo bueno para el país.

Consideró que las elecciones son oportunidades, son ventanas de oportunidad de hacer cambios que todo mundo dice que sí quiere hacer, pero que no dicen cuándo, como es el caso de muchos candidatos a puestos de elección popular.

La presión social que generan las elecciones hace que se tenga que marcar posturas y que se puedan aprobar cosas que en otro momento sería impensable y qué bueno. Si la herencia de esta elección es que haya 10 ó 12 cambios importantes y positivos para el país, bienvenidas sea por el motivo que sea.

¡Bienvenido a la democracia!
El senador consideró que más de la mitad de las propuestas del Presidente son temas en donde coincidimos, como pensiones más justas o incremento anual al salario mínimo por encima de la inflación, pero bajo ningún motivo se puede aprobar la militarización y la fallida estrategia de seguridad pública y mucho menos avalar un Poder Judicial debilitado y supeditado al Presidente, al igual que las instancias electorales.

RGH