Falleció Mons. Abelardo Alvarado Alcántara, Obispo Titular de Tisdro y Auxiliar Emérito de la Arquidiócesis Primada de Méxic

Monseñor Abelardo Alvarado Alcántara, participó en la organización algunos detalles de gran importancia de las últimas dos visitas del Papa Juan Pablo II.
Guillermo Espinosa Publicado el
Comparte esta nota

A 5 días de celebrar sus 88 años de edad falleció Monseñor Abelardo Alvarado Alcántara, Obispo Titular de Tisdro y Auxiliar Emérito de la Arquidiócesis Primada de México, así lo dio a conocer el Arzobispo primado de México Carlos Aguiar Retes.

“Al Pueblo de Dios que peregrina en la Arquidiócesis Primada de México: Con la confianza puesta en Jesús nuestro Señor, vencedor de la muerte y del pecado, entregamos a Dios Padre a nuestro querido hermano Mons. Abelardo Alvarado Alcántara, Obispo Auxiliar Emérito, servidor fiel de la Iglesia, en esta Iglesia particular”.

El Cardenal Aguiar Retes, señaló: “A sus familiares y amigos, les acompañamos en oración por su Eterno descanso mediante las manos maternales de María de Guadalupe”.

Y pidió a los presbíteros (sacerdotes) celebrar la Eucaristía por su eterno descanso.

“Que Jesús, Buen Pastor, continúe acompañando el caminar de esta Iglesia Peregrina de México”.

Cabe destacar que después de algunos años en la formación sacerdotal y en tareas parroquiales donde privilegió el trabajo con matrimonios, familias y catequesis, fue nombrado Rector del Seminario por dos años (1984-1986), recibiendo la consagración episcopal a mitad de camino, el 14 de junio de 1985. Su trato cálido y humano le llevó a conformar un buen equipo formador y un gran ambiente en general en toda la comunidad.

Fue nombrado Vicario Episcopal de la Tercera Zona de Pastoral (1986-1997) desarrollando una gran cercanía con los presbíteros y las parroquias, consolidando la fraternidad sacerdotal y la formación permanente del presbiterio.

Se manifestó muy activo en el segundo Sínodo Arquidiocesano convocado por el Cardenal Ernesto Corripio Ahumada que culminó en 1992, no cabe duda que se ganó el aprecio del presbiterio entero por su trato amable y comprometido.

Se hizo cargo del periódico de la Arquidiócesis de México de 1993 hasta 1998 como Presidente del Consejo Editorial de Nuevo Criterio, donde colaboro directamente en calidad de Director durante el mismo tiempo.

El capítulo más trascendente en su servicio episcopal lo realizó durante más de seis años (1997-2004) como Secretario General de la Conferencia del Episcopado Mexicano.

Allí desplegó ampliamente sus dotes diplomáticas y pastorales, conservando una magnífica relación desde el Consejo de Presidencia con todos sus hermanos obispos, desarrollando una oficina de comunicación con mucho profesionalismo a la altura de tan importante encomienda y estableciendo una constante interlocución con las más altas esferas políticas del país, para llevar buenas relaciones y establecer con claridad los distintos campos de competencia de la Iglesia y el Estado.

Monseñor Abelardo Alvarado Alcántara, participó en la organización algunos detalles de gran importancia de las últimas dos visitas del Papa Juan Pablo II.

Al dejar la Secretaría General de la CEM, el Cardenal Norberto Rivera Carrera le dio un nombramiento muy singular en la Arquidiócesis, “Capellán de las Fuerzas Armadas”, lo que le permitía, ocuparse de todo y de nada, dado que en la Arquidiócesis no había Fuerzas Armadas, ya que son de competencia Federal y, por tanto, un cargo que depende de la Conferencia del Episcopado.

En la Parroquia considerada “Capellanía Militar” ubicada frente al Hospital Militar, donde ejerció su episcopado durante los últimos años, con la libertad de estar en contacto con toda la Arquidiócesis con su ministerio episcopal.

Guillermo Espinosa / @Guiesga

Síguenos en Google News para estar al día
Salir de la versión móvil