Denuncian investigadores y analistas que recursos del Fonsabi se están destinando para aumentar presupuesto en Salud

Analistas, investigadores y representantes de diversas organizaciones sociales criticaron que en el Presupuesto de Egresos de la Federación 2022 se están extrayendo recursos del Fondo de Salud para el Bienestar (FONSABI) para destinar un gran porcentaje de éstos a la atención de la pandemia por la covid-19 y descuidar otras enfermedades.

Integrantes del Centro de Investigación Económica y Presupuestaria A.C. (CIEP), México Evalúa, y de Fundar, Centro de Análisis e Investigación A.C., participaron en el Foro Rumbo al Presupuesto Federal 2022 en Materia de Salud, organizado por la Comisión de Salud de la Cámara de Diputados.

Reconocieron los incrementos en el presupuesto de más de 10 por ciento para el Instituto de Salud para el Bienestar (Insabi), que reflejará el gasto per cápita en 3 mil 641 pesos en el 2022, y el aumento del gasto en salud que pasó al 2.9 por ciento del PIB.

No obstante, cuestionaron que aun están muy por debajo del seis por ciento del PIB que sugieren los organismos internacionales para confrontar las desigualdades en el acceso a la salud.

Al respecto, Janet Oropeza, analista de Fundar externo su preocupación por el manejo financiero del FONSABI, debido a que desde el 2019 ha tenido una reducción del 44 por ciento de sus recursos.

Precisó que a finales del 2019 el fideicomiso tenía 113 mil millones de pesos y al segundo semestre de este año solo tiene 66 mil millones de pesos bajo el argumento del manejo de la pandemia, pero criticó que se haya descuidado la atención de los pacientes del Insabi con enfermedades de alto impacto.

“La lógica de tener un fideicomiso era que estos recursos pudieran mantenerse en el largo plazo para financiar los tratamientos de enfermedades de alto costo, pero vemos que esos recursos han disminuido en estos años”, advirtió.

Por su parte, Mariana Campos, coordinadora del programa de gasto público y rendición de cuentas de México Evalúa, dijo que este incremento en el presupuesto de Salud es financiado por el FONSABI y no es un financiamiento sostenible porque no proviene de ingresos recurrentes, sino de fuentes de ahorro.

Cuestionó, asimismo, que hay un recorte en infraestructura, y se han reducido “dramáticamente” las consultas de primera vez y subsecuentes han caído desde el 2020 en el Insabi.

“Están reduciendo (las consultas) desde el año 2015, pero de manera dramática en 2020 y esto está afectando tanto enfermedades crónico degenerativas como la atención del embarazo, post parto, salud mental, gineco obstetricia, cánceres de la mujer, es un tema que nos hace evidente que no solo tenemos un problema de financiamiento, tenemos también problemas operativos”, lamentó.