Trump y el emir de Catar analizan la seguridad en el Golfo Pérsico

Washington, 9 Jul (Notimex).- El presidente de Estados Unidos, Donald Trump, recibió hoy al emir de Catar, Tamim bin Hamad al Thani, en una reunión a puerta cerrada en la que se analizaron los vínculos económicos y la seguridad regional en el Golfo Pérsico.

Al término del encuentro, Trump señaló a la prensa que era un “gran honor” acoger al emir Tamim bin Hamad al-Thani, a quien describió como un “hombre muy respetado, un verdadero líder”.

El gobierno de Catar está realizando fuertes inversiones en Estados Unidos y comprando equipo militar, agregó.

El mandatario estadunidense indicó que su país está trabajando “en unidad” en la región de Medio Oriente y “creo que está funcionando muy bien”, de acuerdo con la emisora pública estadunidense Voz de América.

Tras asegurar que tiene una larga amistad con el emir de Catar, Trump calificó de excelente la relación de trabajo que mantienen.

Antes de iniciar el encuentro, el jefe de Estado estadunidense aseveró que su gobierno busca que “se detenga el terrorismo en la región” del Golfo Pérsico.

Por su parte, el emir Tamin señaló que su país planea duplicar su actual asociación económica de más de 185 mil millones de dólares con Estados Unidos.

Aseguró que su país se opone firmemente al terrorismo y no tolera a las personas que apoyan o financian este flagelo.

Agradeció al mandatario Trump por su papel “vital” en la búsqueda de una solución a la crisis que involucra a Catar y a los aliados de Estados Unidos en el Golfo Pérsico.

El emir Tamin afirmó además que apoya al gobierno estadunidense en el tema de Siria y coincide en que es un conflicto que tiene que ser detenido de “inmediato”

“No podemos tolerar a un criminal de guerra, no podemos tolerar a alguien que ha matado a más de medio millón de personas de su propio pueblo. Y este asunto debe terminar inmediatamente”, señaló.

El encuentro se produce en medio de las crecientes tensiones entre Irán y Estados Unidos y la disputa de Catar con sus vecinos árabes, que lo acusan de propagar el extremismo, fomentar disturbios regionales y permitir que los fondos fluyan a grupos terroristas.

Esas acusaciones son rechazadas por el gobierno catarí.

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