Pulso Financiero

 

AT&T regresó a México con la misión casi imposible de pelearle clientes a la gigante América Móvil


Marcelo Lara

Bendita y sabia competencia. A más de 20 años fuera de los escenarios de la telefonía sin cables en nuestro país, AT&T regresó a México con la misión casi imposible de pelearle clientes a la gigante América Móvil, con sus estrellas Telmex y Telcel capitaneadas por el magnate Carlos Slim.

Llegaron adquiriendo de tajo empresas como Nextel y Iusacell, incluida la marca Unefon. De entrada, desplazaron de un solo golpe a Movistar, que jamás pudo ser una real competencia para Telcel y asociados.

Recordemos que AT&T es la telefónica más internacionalizada de Estados Unidos y domina este mercado junto a Verizon y T-Mobile. En México podrá moverse sin ataduras; ya cuenta con más de ocho millones de usuarios de telefonía celular y la meta al primer trimestre de 2016 es llegar a 40 millones de ellos de la mano del servicio 4G.

La estrategia es sencilla, pues están operando en un país con altas tarifas y servicios distorsionados por la falta de competencia, por lo cual ofrecerán atractivos subsidios a equipos inteligentes, cero cobros de roaming a Estados Unidos, paquetes en comunidad, así como planes tarifarios con más herramientas, aunque quizá con costos por encima de la media, ya que el nicho de negocios en AT&T es dirigido a consumidores de poder adquisitivo alto.

Cabe señalar que la empresa América Móvil tiene un valor superior a 110 mil millones de dólares, con más de 200 millones de usuarios en América Latina, y la contraparte AT&T se ostenta como la mayor compañía de telecomunicaciones del mundo, cuyas ventas globales ascienden a 125 mil millones de dólares anuales. Además, esta última también vendrá a dar batalla con el servicio de televisión de paga de la mano de DirecTV, compitiendo directamente con Televisa en este segmento y con la empresa Dish.

Por lo tanto, los usuarios de servicios de telecomunicación y entretenimiento digital tendremos en el corto plazo más opciones para escoger la que ofrezca más valor agregado en sus paquetes de servicios; seguramente las tarifas se volverán más competitivas y accesibles a diversos bolsillos inmersos en un mercado difícil de roer.