La crisis de inseguridad en el gobierno de AMLO

 

La negligencia del gobierno de Morena por atender esta situación, deriva en falta de dinero en los bolsillos de las familias juarenses y en la posibilidad de otra tragedia como la ocurrida el pasado 27 de marzo en un centro de detención migratoria.


Kenia López Rabadán*

El gobierno de López Obrador ha fracasado rotundamente en materia de seguridad y se ha rendido frente al crimen organizado.

Las consecuencias de la fallida estrategia de seguridad de Morena son alarmantes. Los grupos del crimen organizado extorsionan a las familias mexicanas, impiden las cosechas de aguacate o limón, reclutan a la semana en el país a 350 personas contra su voluntad, desaparecen y asesinan a sus enemigos y hasta definen a los candidatos de Morena.

Además, un estudio realizado por “The Complexity Science Hub” de Viena, señala que, desgraciadamente, el crimen organizado es la quinta fuente de empleo en México, ya que entre 160 mil y 185 mil personas trabajan para estas bandas delincuenciales. Es inadmisible que, el gobierno federal teniendo conocimiento de esta problemática, siga abrazando a los delincuentes y generando un clima de impunidad para ellos.

Lo que ha ocasionado la complacencia del gobierno de Morena es que la violencia vaya en aumento. Las cifras oficiales lo demuestran, durante esta administración, más de 162 mil personas han sido asesinadas y más de 44 mil se encuentran desaparecidas.

Todo el territorio nacional derrama sangre. En las fronteras de nuestro país, tanto en el norte como en el sur, el crimen organizado se disputa el territorio. Son terribles las imágenes que se hicieron públicas este fin de semana, donde pobladores en Chiapas reciben con aplausos y vivas -quizá por consigna o amenaza-, a los integrantes de un cartel. Pareciera una película, pero es la cruel realidad, son las imágenes del México profundo.

Pero su actuación no sólo se limite a eso, los criminales también secuestran a migrantes, los extorsionan y amenazan. Los derechos humanos de los migrantes son vulnerados, su vida y su integridad están en riesgo constante y la falta de atención de este gobierno, ha ocasionado una crisis social, económica y productiva, lo mismo en Chiapas que en Ciudad Juárez, a donde asistí este fin de semana y donde pude constatar lo que se vive allá, lo cual por cierto, es devastador. 

Se encuentra colapsado el comercio transfronterizo y están teniendo impactos en la producción maquiladora, que es la principal fuente de empleo en la región. Ya se cumplió más de una semana del bloqueo para el paso de mercancías y no hay una respuesta eficiente por parte de la autoridad federal.

La negligencia del gobierno de Morena por atender esta situación, deriva en falta de dinero en los bolsillos de las familias juarenses y en la posibilidad de otra tragedia como la ocurrida el pasado 27 de marzo en un centro de detención migratoria. Urge que el gobierno federal implemente una política migratoria integral y se haga responsable del caos que ha generado su desatención a los temas migratorios y de seguridad.

*Senadora / presidenta de la comisión de Derechos Humanos

RGH